(CNAd/InfoCatólica) «Si la cantidad de católicos disminuye en 14,000 cada año, esto significa que diocesanamente se requeriría una reducción anual de 14 iglesias para mantener la carga económica sobre los católicos restantes», dice el informe interno citado por el periódico.
Sobre esta base de cálculo y asumiendo que el número de renuncias a la iglesia continúe desarrollándose de manera lineal, resultaría en el cierre de alrededor de 150 iglesias para el año 2033.
Actualmente, la archidiócesis de Viena cuenta con alrededor de 1,000 iglesias y un total de 3,500 propiedades.
«Los números mencionados no tienen una base científica, sino que son simples progresiones lineales de tendencia (si la tendencia continúa de esta manera...) sin pretensiones de precisión y, por lo tanto, tienen más el carácter de un experimento mental», dijo Prüller.
Nadie en la diócesis está considerando «entregar 14 iglesias al año», pero «La cifra muestra, por supuesto, que debemos abordar activamente el hecho de que las cargas económicas por católico están aumentando».
En los últimos años, «hemos cerradp 0.6 iglesias por año». En los próximos años, se espera que haya más devoluciones de iglesias, pero «comedidamente».
Prüller indica que se han de establecer «planes pastorales y económicos para edificios»: «¿Qué edificios queremos y podemos mantener a medio y largo plazo?» Sin embargo, no se trata únicamente de «mantener o ceder, sino también de un uso ampliado o modificado».
«Existen muchas ideas y buenos ejemplos de mejores prácticas en el extranjero, un tesoro que queremos y debemos aprovechar en los próximos años», explicó.
Principalmente, cuando se abandona un edificio de iglesia completo, «se debe considerar la entrega a otras confesiones cristianas». Sin embargo, esto no se podrá hacer siempre, dijo Prüller.
«Nos importa principalmente la gente. Por lo tanto, también queremos crecer en lo que respecta a los creyentes. No para poder financiar mejor nuestros edificios, sino porque queremos transmitir lo que hemos experimentado a través de la fe en significado, fuerza y alegría», explicó.
La cantidad de iglesias con las que la archidiócesis lo hace es «secundaria». Debe guiarse por lo «financieramente factible» Las reservas de capital solo podrán financiar un déficit «por unos pocos años más», por lo que «definitivamente no hay otra escapatoria que el ahorro».