(Kath/InfoCatólica) El contexto de la decisión de Schoch es que en Vorarlberg hay un debate sobre si los hospitales deben ofrecer abortos. El gobierno local se ha pronunciado en contra de ello.
Recientemente, el obispo de Vorarlberg, Benno Elbs, también se manifestó de manera muy clara y objetiva, indicando que la Iglesia se opone a la muerte de los niños no nacidos.
La entrevista con el obispo Elbs llevó a la política del partido Verde, que alguna vez fue monaguilla y líder juvenil católica, a renunciar a la Iglesia. «Este fin de semana, dejé de esperar que esta Iglesia se preocupe por las mujeres, vea sus vidas y comprenda de qué se trata: la autonomía, los derechos humanos», escribió en Facebook, dejando claro que el derecho humano a la vida no es un tema importante para ella.
Cabe preguntarse si la edil de Bregenz no era consciente de la postura inamovible de la Iglesia sobre el derecho a la vida de todo ser humano desde el primer momento de su concepción.