(InfoCatólica) Esta residencia en Managua conocida como Residencia Villa del Carmen, fue objeto de la acción policial bajo la premisa de que también pertenece al gobierno. Ante esta situación, los religiosos presentaron a la policía la documentación legal que confirma la propiedad de la vivienda y establece que es un edificio separado de la Universidad.
El fallo emitido por el Juzgado Décimo del Distrito Penal de Audiencias de la Circunscripción Managua, mediante el cual se confiscaron los activos de la UCA debido a acusaciones de «terrorismo» contra los jesuitas, ordenó la incautación de los bienes inmuebles de la universidad, excluyendo la vivienda que, según argumentó la comunidad ante la policía, no guardaba relación con la institución educativa.
El hecho de que se ignore la existencia de una orden judicial vuelve a poner de manifiesto que el régimen está persiguiendo abiertamente a la Iglesia.
El comunicado informa que «los agentes ignoraron por completo la documentación presentada y ordenaron a los miembros de la comunidad abandonar la residencia junto con sus pertenencias». Los jesuitas obedecieron y tuvieron que dejar la vivienda prácticamente con lo mínimo. Han pasado a residir en la comunidad de San Ignacio, también en Managua.
La Provincia Centroamericana de la Compañía de Jesús, cuya sede se encuentra en San Salvador, condenó enérgicamente el «desalojo» de los sacerdotes jesuitas. A través de su comunicado, rechazaron esta «afrenta» y expresaron su confianza en que el «Señor de la Historia» seguirá acogiendo a los jesuitas de Nicaragua bajo su amparo en estos momentos difíciles.