(GaudiumPress/InfoCatólica) Recientemente, Mons. José Antonio Canales, quien ejerce como Obispo en Danlí, Honduras, cerca de la frontera con Nicaragua, aseguró que Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa enfrentando persecución, no se dejará silenciar, incluso si se encuentra tras las rejas.
«No es un hombre de quedarse mudo. La situación es bastante compleja porque él quiere ser libre, pero en Nicaragua; volver a su rebaño. Monseñor Álvarez está convencido de que el Señor lo tiene como pastor de la Diócesis de Matagalpa y él no va a renunciar a ser pastor, porque para nosotros este es un designio de Dios. Así lo entendemos», dijo el Obispo de Danlí.
Asimismo, su hermano obispo mencionó que «en la Catedral de Danlí siempre está la figura de Monseñor Rolando Álvarez», prometiendo que Honduras jamás lo olvida.
Por otra parte, Mons. Rolando Álvarez ha sido nominado para el prestigioso Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia, un reconocimiento anual otorgado por el Parlamento Europeo a destacadas figuras en la defensa de los derechos humanos.
La propuesta fue presentada por el grupo Renew Europe, una bancada liberal dentro del Parlamento, y recibió el apoyo de varios eurodiputados independientes. Además, la Fundación para la Libertad de Nicaragua, liderada por Félix Maradiaga, y el World Liberty Congress, conformado por organizaciones de Venezuela, Nicaragua y Cuba, también respaldan fervientemente esta nominación.
De igual forma, hace unas semanas, la Sociedad Internacional de Derechos Humanos (ISHR) propuso a Mons. Álvarez y Mons. Silvio Báez, dos destacados Obispos nicaragüenses, para ser considerados al premio Nobel de Paz.
La nominación se basa en su valiente postura y lucha contra el régimen Ortega, a pesar de ser fuertemente perseguidos.