(CNE/InfoCatólica) El primer proyecto de ley partió de un grupo de diputados del Bundestag en torno a Lars Castellucci (SPD) y Ansgar Heveling (CDU). Querían regular una prohibición legal del suicidio asistido organizado y la eutanasia a través del derecho penal. En su opinión, la muerte asistida organizada estaría permitida si la persona en cuestión es mayor de edad y sabe lo que le espera. La persona debe haber sido examinada al menos dos veces por un psicólogo y se debe haber realizado una sesión de asesoramiento. Los diputados proponentes quieren descartar la presión social. También debe estar claro de que la persona no sufre trastornos mentales. Este proyecto de ley fue rechazado el jueves por la mañana con 304 votos a favor, 363 en contra y 23 abstenciones.
El segundo proyecto fue presentado por Katrin Helling-Plahr (FDP) y Renate Künast (Verdes). Querían que la eutanasia dejara de estar incluida en el derecho penal. Creen que las personas que deseen la eutanasia deben tener acceso a medios que les permitan poner fin a su vida. Previamente, debe haber tenido lugar una sesión de asesoramiento. Este proyecto de ley también fue rechazado, con 287 votos a favor, 375 en contra y 20 abstenciones.
Sentencia perversa del Constitucional alemán
El Parlamento alemán se vio obligado a encontrar una nueva regulación sobre la eutanasia, ya que el Tribunal Constitucional de Alemania anuló el párrafo 217 sobre la eutanasia en 2020. El párrafo, según la sentencia del tribunal, violaba el derecho a la personalidad de los ciudadanos consagrado en la Constitución. «Esto incluye el derecho a decidir cuándo morir», dijo uno de los jueces. El apartado 217 hacía prácticamente imposible la muerte asistida.
La sentencia del Tribunal Constitucional de Karlsruhe se dictó cuando Angela Merkel aún era canciller. No pudo hacerse cargo del caso porque el tribunal dictaminó que antes debía celebrarse un amplio debate público sobre la eutanasia. Eso es lo que ocurrió. Siguió un intercambio de opiniones y pensamientos a través de los medios de comunicación.
Eutanasia y nazismo
En Alemania, la eutanasia es un tema muy sensible. El término recuerda a los alemanes los cientos de miles de discapacitados físicos y mentales que mataron los nazis. Por ello, los alemanes utilizan el término Sterbehilfe, o ayuda para morir.
La Fundación Alemana para la Protección del Paciente rechazó cualquier proyecto de ley. Argumenta que el derecho a la autodeterminación de las personas que quieren morir y la protección contra los abusos de terceros es demasiado complejo para consagrarlo en la ley.