(LifeSiteNews/InfoCatólica) El «obispo de América», monseñor Joseph Strickland, ha recibido una «visita apostólica» del Vaticano que se especula que podría ser una respuesta a sus abiertas declaraciones y acciones relacionadas con la defensa de la doctrina y moral católica que han suscitado controversia en algunos ambientes eclesiales, según informan ciertas fuentes.
Strickland, obispo de Tyler, Texas, que es bien conocido por su abierta defensa de la doctrina católica, está siendo objeto de una «visita apostólica» del Dicasterio para los Obispos, dirigida por dos obispos jubilados, posiblemente el obispo Gerald Frederick Kicanus y el obispo auxiliar Dennis Joseph Sullivan. Así han informado a Church Militant, cuyas fuentes aseguran que llevan una semana interrogando a empleados de la diócesis.
Se desconoce el tema de la visita, así como las consecuencias posteriores, pero se especula que podría estar relacionada con varias declaraciones públicas que algunos funcionarios del Vaticano consideran «imprudentes».
«No está claro si la visita es una advertencia al obispo de 63 años o el preludio de su destitución», añade Church Militant. «Lo que parece estar claro es que, sea cual sea la razón oficial, lo más probable es que sea un pretexto para silenciar los comentarios de Strickland, según fuentes de Church Militant».
Entre las posturas del obispo que han suscitado controversia está el haber instado al Papa a negar la Sagrada Comunión a la ex presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos Nancy Pelosi por su apoyo al aborto legal, acusarle de un «programa para socavar el Depósito de la Fe» y condenar la «blasfemia» pro-homosexualidad del padre jesuita James Martin. En 2022 instó a los fieles de su diócesis a «observar un día de oración y penitencia en el trágico aniversario de Roe vs. Wade, el sábado 22 de enero» y a peregrinar a la Catedral para participar en la Misa especial de «expiación por los más de 64 millones de niños no nacidos»
También se ha expresado con contundencia sobre controversias morales en la política y la cultura de Estados Unidos, como el espionaje a católicos por parte de la administración Biden o las manifestaciones públicas de grupos autodenominados «satánicos». Más recientemente intervino en una protesta contra el equipo de béisbol de los Dodgers de Los Ángeles por acoger a una compañía de drag queen anticatólica llamada Hermanas de la Perpetua Indulgencia, que se presentan disfrazadas de monjas.
«A menudo digo que tenemos que ser cristianos del siglo I en el siglo XXI», declaró Strickland en aquel acto. «Probablemente la mayoría de nosotros no tendremos que derramar nuestra sangre, pero si lo hacemos, debemos estar preparados, como los mártires. Pero lo más importante es que vivamos nuestro martirio. Tenemos que vivir como los que están dispuestos a morir y a vivir por la sangre que fue derramada por todos nosotros».
En relación con este último suceso y la reacción de monseñor Strickland, el cofundador y redactor jefe de LifeSiteNews, John-Henry Westen, comenta que el obispo «vino corriendo a Los Ángeles desde la Conferencia Episcopal. Es el obispo de Tyler quien fue a LA; el obispo de LA no haría una procesión». Y añade: «Otros obispos probablemente no querían que fuera. Uno se puede imaginar qué le habrán dicho en la Conferencia Episcopal, pero él fue de todos modos. Fue a defender la fe de un sacrilegio absoluto, del grupo de odio anticatólico más repugnante de América».
«Tenemos que rezar esta noche por el obispo Strickland», continúa Westen. «Y por la cordura en la Iglesia, porque están atacando al obispo número uno de Estados Unidos. De hecho, hay pocos obispos en todo el mundo que sean más valientes, más fieles y más enamorados de Jesucristo que el obispo Strickland».