(NCRegister/InfoCatólica) Hadleigh Thomas sintió una llamada a la acción en su primer año en la Universidad Ave Maria en 2017, después de que su compañera de habitación le confiara que estaba embarazada. Casi al mismo tiempo, Thomas se inspiró en una conferencia de Students for Life con los esfuerzos del grupo para ayudar a las estudiantes embarazadas en los campus universitarios.
«Fue una colisión de mundos», dijo Thomas al National Catholic Register (NCR), al ver que «esto ocurre en nuestro campus» y que «los recursos son supernecesarios».
Thomas formaba parte de la junta del grupo Ave for Life, y empezaron a ampliar los recursos ofreciendo a las estudiantes transporte gratuito a una clínica local de embarazos que ofrece pruebas de embarazo gratuitas, ecografías y apoyo entre iguales. La compañera de habitación de Thomas volvió al campus con su hijo después de estar un tiempo fuera para dar a luz.
«Ella fue la que impulsó muchos de los recursos adicionales que ofrecemos», explica Thomas, «porque volvió como madre soltera y se preguntaba: "Quiero obtener mi título, pero ¿dónde voy a vivir?"». Esa pregunta impulsó un acuerdo con la administración, por el que ella y su hijo pequeño pudieron disponer de una suite en los dormitorios con más espacio y tranquilidad.
La necesidad de cuidar a los niños en medio de un horario de clases muy apretado dio lugar al sistema de niñeras voluntarias de los estudiantes, que Campus Care, el programa para padres estudiantes que Thomas cofundó, tiene en marcha hoy en día, y ya cuentan con más de dos docenas de niñeras.
«Un año después de que esa primera madre volviera al campus», dijo Thomas, «hubo algunas parejas más que se quedaron embarazadas, y pudimos acompañarlas de varias maneras». Ella y otros estudiantes provida sintieron la necesidad de colaborar para que estos padres estudiantes tuvieran todos los recursos necesarios para no abortar.
Algunas de las estudiantes que se quedaron embarazadas se casaron con sus parejas y siguieron estudiando mientras intentaban mantener a sus jóvenes familias. Thomas dijo que estos matrimonios necesitaban bastante apoyo, ya que normalmente el padre iba a trabajar además de ser estudiante a tiempo completo.
«Al principio la duda era simplemente: "¿Cómo podemos conseguir suficientes canguros para cubrir todas sus horas de clase?"». dijo Thomas. «Pero luego se transformó que que estas madres y padres, que necesitan tiempo de comunidad, descanso, oración, '¿Cómo podemos proporcionarles esto? Se fue ampliando el tiempo de ayuda según las necesidades y fue realmente hermoso ver cómo la gente se ponía manos a la obra».
«Llevó trabajo ponerlo en marcha y reclutar voluntarios», dijo, «pero contó con el apoyo de los estudiantes y también con el del personal».
Describió la colaboración con el centro para dar prioridad a los padres jóvenes recién casados en las casas adosadas fuera del campus, ya que la universidad tiene dormitorios para un solo sexo.
La comunidad universitaria también acogió favorablemente el programa. «Al principio, todo el mundo se quedaba mirando y preguntaba: "¿Por qué hay un bebé en la cafetería?"», explicó Thomas, pero rápidamente pasó a «acogerles completamente y siempre que pasaba por la cafetería veía a un jugador de fútbol lanzando una pelota a este niño. Todo el mundo sabía su nombre; todo el mundo le quería».
En lo que Thomas llamó un momento de «cerrar el círculo», ese primer bebé que se benefició de Campus Care fue el portador de los anillos en la boda de sus padres.
Fue una bendición ver cómo el campus «aceptaba y se alegraba realmente de estas pequeñas vidas y de los sacrificios y la valentía de estas madres» y «cómo cambiaba los días de todos y les hacía salir de sí mismos».
Pasión por la misión en el mundo post-Roe
Thomas tiene la esperanza de que «a medida que más gente se entere, más campus los adoptarán». Ha oído hablar de «diferentes campus que están implementando y considerando estos recursos», entre ellos The Catholic University of America, University of Mary y Belmont Abbey College.
Dijo que la decisión de Dobbs de anular Roe ha traído «una ola positiva en el movimiento provida que está empezando a decir: “Vale, ¿qué vamos a hacer ahora al respecto?”» y, «Por fin conseguimos anularlo, y ahora tenemos que dar un paso al frente y ayudar a estas personas».
Sarah Roche, estudiante de último curso, dirige ahora Campus Care. Empezó como canguro voluntaria en el grupo, y comentó que «como estudiante universitaria, cuando más necesitas el dinero», era alentador «ver a estos estudiantes ofrecer su tiempo para hacer de canguro gratis para estas familias que lo necesitan».
Personalmente, dijo, los padres estudiantes «me han enseñado tanto sobre lo que significa realmente obedecer tu llamado en la vida y ser obediente al Señor».
Roche cree que la decisión de Dobbs «encendió la llama para seguir animando a esta generación de universitarios y jóvenes a salir y seguir luchando; y especialmente en Ave, tenemos mucha gente orientada a la misión. La decisión realmente nos animó a que estamos llamados a la misión y que es alcanzable».
«A medida que las universidades se han ido haciendo cada vez más laicas, han eliminado este componente de comunidad», reflexionó. «Cuando eliminamos ese elemento, entonces sí que estas personas se sienten solas y aisladas sin ninguna ayuda. Y es entonces cuando sienten que su única opción es el aborto».
Subrayó: «Si se siguen desarrollando grupos como Campus Care, realmente se demuestra a la gente que absolutamente pueden hacerlo».
