(CMB/InfoCatólica) La Junta Directiva del Colegio de Médicos de Burgos ha remitido hoy una carta destinada a todos los colegiados para poder aclarar las cuestiones debatidas por la Comisión Deontológica.
La Junta Directiva del Colegio Oficial de Médicos de Burgos, al igual que su Comisión Deontológica, a raíz de la polémica suscitada el 8 de mrzo de 2023, tras el escrito enviado el pasado martes (ndr:ver abajo) a sus colegiados, quiere manifestar lo siguiente:
En primer lugar pedir disculpas por la redacción del texto pues la interpretación del mismo es la contraria a la pretendida.
Ante todo, y como manifestación principal debemos resaltar que el espíritu de esa carta no es poner en duda la profesionalidad de los compañeros que estuvieron en primera línea a los que reconocemos su inmenso trabajo en una situación muy dura, especialmente durante la primera ola de la pandemia por COVID-19. La colaboración y la entrega que tuvimos entre los sanitarios fue el máximo exponente de profesionalidad para solventar la crisis sanitaria.
Nuestra intención con el citado escrito, en ningún momento ha sido ofender ni menospreciar a nadie. Y si bien en él, no se concretaba ninguna fase de la epidemia, desde luego no se refería a lo sufrido durante el año 2020. La continuidad de determinadas medidas y actitudes adoptadas con posterioridad y una vez superadas las fases agudas, disponiendo de más medios y conocimientos han sido las que nos han puesto una voz de alarma. El COMBU y la Comisión Deontológica hemos recibido testimonios de familiares de pacientes por la atención al final de la vida de los pacientes COVID, especialmente a finales del 2021 y durante el 2022 que nos deberían hacer reflexionar desde el punto de vista humano, ético y deontológico. Esas muertes producidas en soledad han causado un profundo dolor en las familias.
Son estos hechos concretos los que nos han impulsado a hacer autocrítica constructiva, sin culpar ni juzgar a ningún compañero, tan sólo repensar si las normas sanitarias deberían haber contemplado la excepcionalidad de las mismas y haber favorecido una despedida digna, en intimidad y acompañada de sus seres queridos.
El Colegio es un órgano de interrelación entre la sociedad y los médicos, por lo que una de nuestras obligaciones es examinar y transmitir, si así procede, las quejas que nos exponen los miembros de nuestra sociedad.
El objetivo del escrito enviado hace referencia a una situación concreta y en un tipo de paciente concreto, como es el paciente en el final de su vida, sin posibilidad de cura y una vez superado el denominado techo terapéutico, próximo a su éxitus.
El exceso de fallecimientos en soledad y sin acompañamiento durante la epidemia de Covid, es un hecho reconocido en nuestro país y no exclusivo de los Hospitales de esta provincia.
Como última consideración, sólo nos queda agradecer y pedir perdón a todos los profesionales sanitarios que con su desvelo y abnegación, se hayan podido sentir agraviados por nuestro escrito y manifestarles sinceramente que no era esa nuestra intención. Un escrito que iba dirigido únicamente a los médicos colegiados como reflexión a posteriori de la crisis sanitaria por la epidemia.