(Kath.net/InfoCatólica) El obispo justifica la pintura como un «intento de entablar un diálogo con el arte contemporáneo». Esto ocurre en tres de las cerca de 300 iglesias parroquiales y de peregrinación de la diócesis. «¿Es demasiado?», pregunta Glettler, y sigue con la pregunta: «¿Es usted el dueño de la iglesia del hospital?».
A continuación, Glettler afirma que supuestamente hay «una gran cantidad de comentarios positivos» sobre el lienzo por parte de personas que quieren contemplarlo sin más, pero no aporta ninguna prueba de ello. Nada dice de la avalancha de fieles que piden la retirada de la pintura por considerarla blasfema.
En la introduciión de la carta arremete contra kath.net. Sospecha que la información sobre la foto procede de kath.net y a continuación afirma «que esta plataforma informa de forma manipuladora e incendiaria». Por cierto, Glettler se ha negado varias veces en las últimas semanas a responder a preguntas bastante normales tras consultas amistosas de kath.net sobre determinados temas que eran obviamente desagradables para el obispo.