(El Diario/InfoCatólica) A la salida del encuentro Joan Ribó, de Compromís, dijo que había sido «una reunión muy cordial. Hemos estado tratando una serie de temas por su parte y por mi parte. Yo creo que hay una coincidencia en muchos factores. Hemos estado hablando también de una serie de aspectos que a mí me parecen importantes».
El alcalde transmitió a Mons. Benavent que «el Ayuntamiento es un ayuntamiento en el que caben todos, tanto los creyentes de una religión como los de otra o como los no creyentes y, por lo tanto, el papel del alcalde es el de ser una persona neutra en los actos religiosos».
Además, Ribó aseguró que ambos hablaron del uso del valenciano en la liturgia católica:
«Yo le he querido resaltar al arzobispo la importancia de la Iglesia en las tareas de normalización de nuestra lengua en el entorno de la ciudad de València. Hemos estado comentando lo que se está haciendo y hemos hablado de la problemática al respeto».
Se da la circunstancia de que Mons. Benavent tuvo el valenciano como lengua materna, a diferencia de su predecesor, el cardenal Cañizares, que era de una región de Valencia donde la lengua materna es el castellano.
El alcalde, quien reconoció «la disponibilidad importante» del arzobispo, le transmitió también la voluntad del Ayuntamiento de nombrar hijo adoptivo a «una persona que está relacionada con la Iglesia». Por su parte, Mons. Enrique Benavent le explicó al alcalde la próxima reestructuración de algunas parroquias que el Arzobispado tiene previsto acometer.