(Kath.net/InfoCatólica) El Círculo de Sacerdotes de Chur no está satisfecho con los últimos cambios introducidos en el Código de Conducta de la diócesis suiza. En la declaración publicada por el obispo, Mons. Joseph Bonnemain, sobre las directrices «Agresiones sexuales en el entorno eclesiástico» de la Conferencia Episcopal Suiza y la Asociación de Superiores Mayores de Órdenes Religiosas en Suiza, la diócesis de Chur afirma:
»Las diócesis y las comunidades religiosas y otras comunidades eclesiásticas tienen su propio concepto de prevención que establece los criterios básicos para una percepción adecuada/profesional de la cercanía y la distancia y para una interacción mutua respetuosa y consciente. Este concepto de prevención constituye la base para el desarrollo de códigos prácticos de conducta y normas que tengan en cuenta las circunstancias de cada institución, organismo y estructura local».
El Obispo explicó que fue el primero en firmar el Código de Conducta y que estaba convencido de la calidad de este instrumento de prevención. También está convencido de que el Código de Conducta está en consonancia con nuestra fe católica:
«Aplicar el Código de Conducta no es sólo firmarlo. Se trata de comprometerse con su contenido. Se trata de interiorizar su mensaje y estar preparado para comportarse profesionalmente en el entorno eclesiástico: libre de cualquier abuso de poder, así como de abusos sexuales y espirituales. Todas las instrucciones de actuación formuladas en el Código de Conducta persiguen este objetivo, un cambio cultural en la interacción eclesiástica»
Por ello, espera que todo su personal acepte el código de conducta y se comporte en consecuencia:
«Si alguien quiere añadir una aclaración al firmar el código de conducta, esto no debe relativizar su carácter vinculante ni cambiar sus criterios arbitrariamente».
Para el Círculo de Sacerdotes de Chur, sin embargo, se mantienen las dudas que ya expresaron con anterioridad y han pedido al obispo que aclare los últimos cambios. Ese grupo de sacerdotes ya había declarado el 22 de abril de 2022 que aceptaba el 95% de lo que está escrito en el «Código de Conducta» (CC) de la diócesis de Chur y que se comprometián con la preocupación de la prevención de agresiones. También explicaron, con fundamento, qué puntos del CC contradicen las enseñanzas de la Iglesia católica y son, por tanto, inaceptables. Entre otras cosas, la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad ya no podrá defenderse públicamente en el futuro si se respeta el CC. Además, los «derechos sexuales», que según la lectura generalizada de hoy también incluyen el aborto, tendrían que ser respetados y la correspondiente enseñanza de la Iglesia suprimida. Además, los miembros del Círculo Sacerdotal de Chur rechazaron la exigencia contenida en el CC de «apoyar la »salida del armario», que, como es bien sabido, ha sido durante décadas el medio por excelencia para hacer avanzar la llamada «cultura gay».
Dado que el obispo de Chur advierte que, aunque se tengan reservas, hay que respetar el carácter vinculante del CC, los sacerdotes le piden que responda a las siguientes preguntas en cuanto al contenido:
1. La «especificación» de firmar el CC sólo bajo reserva de la doctrina de la Iglesia sobre la fe y la moral contenida en el «Catecismo de la Iglesia Católica» y bajo reserva de la opinión del Círculo Sacerdotal del 22 de abril de 2022, ¿constituye una relativización inadmisible del carácter vinculante del CC?
2. ¿Significa tal reserva, según la convicción del obispo, que los «criterios» del CC pueden ser «modificados arbitrariamente»?