(LifeSiteNews/InfoCatólica) La Iglesia Anglicana de Uganda ha condenado enérgicamente a la Iglesia de Inglaterra por su aceptación y bendición de las uniones entre personas del mismo sexo.
En una carta publicada el 10 de febrero, el arzobispo de la Iglesia de Uganda, Stephen Samuel Kaziimba, respondió a la reciente votación de la Iglesia Anglicana de Inglaterra aprobando la bendición litúrgica de las uniones del mismo sexo, una decisión alabada por el arzobispo anglicano de Canterbury, Justin Welby, y el arzobispo de York, Stephen Cottrell, quienes afirmaron en una declaración conjunta: «Por primera vez, la Iglesia de Inglaterra acogerá públicamente, sin reservas y con alegría a las parejas del mismo sexo en la Iglesia».
Criticando la decisión como un intento de apaciguar a ambas partes en el debate sobre el «matrimonio» entre personas del mismo sexo proponiendo una contradicción, el arzobispo Kaziimba dijo que la Iglesia de Inglaterra ha «decidido permitir que el clero presida bendiciones de uniones del mismo sexo y han aprobado oraciones y liturgias suplementarias para tales ocasiones. A la Iglesia de Inglaterra se le da muy bien hacer declaraciones contradictorias y esperar que todo el mundo crea que ambas pueden ser ciertas al mismo tiempo. Eso es lo que han hecho con esta decisión».
Kaziimba continuó: «La única diferencia significativa entre una boda y un servicio de “bendición” es la terminología utilizada. La Iglesia de Inglaterra insiste en que no está cambiando su doctrina sobre el matrimonio. Pero, en la práctica, están haciendo precisamente eso».
Distanciando a la Iglesia de Uganda del cambio efectivo de doctrina, Kaziimba insistió: «Pero, lo que quiero que sepan es que, si parece una boda, y suena como una boda... ES una boda».
Reiterando que la condena de la sodomía está contenida en las Escrituras, el arzobispo expuso la concepción cristiana tradicional del matrimonio, la familia y la moral sexual.
Declaró: «Desde la primera página de la Biblia en el libro del Génesis hasta la última página de la Biblia en el libro del Apocalipsis, está claro que el diseño de Dios para el florecimiento humano es que formemos parte de una familia - una familia que se define como un hombre y una mujer unidos en santo matrimonio para toda la vida y, si Dios quiere, una unión que produzca hijos. La Palabra de Dios ha dicho que el único contexto para las relaciones sexuales es en el contexto de un matrimonio de un hombre y una mujer».
Y continuó:
«Dado que el matrimonio de por vida y exclusivo entre un hombre y una mujer es el único contexto para las relaciones sexuales, la Biblia califica de pecado cualquier otro tipo de relación sexual. Ya sea adulterio, o fornicación, o poligamia, o relaciones homosexuales. Todas son pecado y todas nos separan de Dios.
- Eso significa que dormir con tu novia o tu novio antes del matrimonio es pecado.
- Eso significa que, si estas casado y tienes un «segundo plato», eso es pecado.
- Eso significa que, si tomas una segunda o tercera esposa, eso es pecado.
- Eso significa que, si te involucras en relaciones homosexuales, eso es pecado».
Dios no puede bendecir lo que llama pecado
El arzobispo afirmó que la Iglesia de Uganda se mantendría fiel a la enseñanza bíblica sobre «el matrimonio de por vida y exclusivo entre un hombre y una mujer», negándose a aceptar o bendecir los pecados sexuales. Condenó a la Iglesia de Inglaterra por apartarse de esta enseñanza de la revelación, diciendo: «Nuestro mensaje es el mensaje de la Biblia, que es: 'Vete y no peques más'. La Iglesia de Inglaterra, por otra parte, se ha apartado de la Biblia y su nuevo mensaje es el mensaje opuesto de la Biblia. Ahora dicen: "Ve y peca más". Incluso ofrecen bendecir ese pecado. Eso está mal. Como Iglesia de Uganda no podemos aceptarlo. Dios no puede bendecir lo que llama pecado».
A continuación, el arzobispo recordó el testimonio de los mártires católicos ugandeses, que fueron asesinados por haberse negado a practicar los actos homosexuales exigidos por los gobernantes del país. Esta negativa se cuenta como testimonio de sangre de la doctrina moral de Cristo específicamente sobre la grave pecaminosidad de todos los actos homosexuales.
«Todos conocemos la historia de los mártires de Uganda, que se negaron a mantener relaciones homosexuales con sus líderes. Se mantuvieron firmes en su fe cristiana y fueron martirizados por ello. No podemos traicionarlos a ellos ni a nuestro Señor Jesucristo. No traicionaremos la Palabra de Dios ni Sus caminos. La Biblia nos dice que sólo Jesús es 'el camino, la verdad y la vida', y que es el mismo 'ayer, hoy y siempre'».
El arzobispo retó entonces a la Iglesia de Inglaterra a salir de la «Comunión Anglicana» por su alejamiento de la enseñanza de Cristo sobre el matrimonio. Declaró: "Ahora queremos preguntar a la Iglesia de Inglaterra: '¿Tenéis la integridad de salir de la Comunión Anglicana porque os habéis apartado de la fe anglicana? Dios os llamó a predicar un Evangelio de arrepentimiento y fe. En vez de eso, eres como Jonás. Has desobedecido y corres en dirección contraria».
«Rezamos para que se arrepientan», continuó el arzobispo. «Y, si se niegan a arrepentirse, entonces les pedimos que tengan la integridad de formar su propia Comunión de Canterbury porque lo que creen no es anglicanismo y no es la fe una vez entregada a los santos. Si quieren llevar a toda su Iglesia al vientre de una ballena, son libres de hacerlo; después de todo, somos Provincias Anglicanas autónomas. Nosotros pensamos que es una mala idea, pero ellos son libres de hacerlo. Pero NO son libres de arrastrar a toda la Comunión Anglicana con ellos. La Comunión Anglicana NO es una extensión de la Iglesia de Inglaterra».
A continuación, el arzobispo advirtió a todos los ugandeses contra los intentos de los grupos pro-homosexuales de captar niños en la escuela. Rechazando la táctica de la promesa y el señuelo del dinero, Kaziimba declaró: «Ahora que nuestros hijos han vuelto a la escuela, cuidado con las organizaciones gays bien financiadas que están reclutando a nuestros hijos para la homosexualidad. No sólo en Kampala, sino en todo el país. Apuntan a nuestra pobreza y prometen dinero a nuestros jóvenes».
«Mis compatriotas ugandeses: no podemos servir a Dios y a las riquezas», declaró. «No podemos servir a Dios y al dinero. No perdáis vuestra alma porque penséis que vais a ganar el mundo entero gracias al dinero que os ofrecen. No pienses que puedes aceptar el dinero, pero no caer en su trampa. Es mentira; te están explotando con ese dinero».
Volviendo de nuevo a las Escrituras, el arzobispo concluyó: «La Biblia dice: 'Resistid al diablo y huirá de vosotros'. Así que di: 'No'. Hoy estoy aquí para declarar: 'En cuanto a mí y a mi casa, serviremos al Señor'». La Cámara de Obispos está unida en esto. La Asamblea Provincial está unida en esto: «En cuanto a mí y a la Iglesia de Uganda, serviremos al Señor'».