(InfoCatólica) La Fiesta de la Epifanía es uno de los seis días de precepto en la Iglesia en Polonia que caen fuera de los domingos. Desde hace 14 años (por primera vez en 2009 en Varsovia) se organizan procesiones de los Reyes Magos en las calles de las ciudades polacas. Es una nueva tradición que se está volviendo cada vez más popular y se está extendiendo por todo el mundo, especialmente en las comunidades polacas en el extranjero. De esta manera, los cristianos manifiestan públicamente la fe, mientras que para los niños, la procesión es una oportunidad para jugar a disfrazarse, especialmente con la forma de santos. Algo muy distinto a la chabacanería en la que se han convertido en otros países.
En la Polonia de antes de la guerra, la celebración de los Reyes Magos era un día feriado hasta noviembre de 1960, abolido por los comunistas de la República Popular de Polonia. La restauración como día feriado fue establecida por el Sejm en 2010. A partir del 6 de enero de 2011 vuelve a ser festivo, como ocurre en tres Lander alemanes, Austria, Chipre, Croacia, Finlandia, Grecia, España, Eslovaquia, Suiza, Suecia, Venezuela e Italia.
Este año, con el lema, «Que nos guíe la estrella», la 15ª Procesión de los Reyes Magos se celebró en más de 750 ciudades de Polonia y por polacos de todo el mundo, con una cifra récord de participantes de alrededor de 1,5 millones. Es la mayor representación mundial de la Navidad en las calles.
El evento principal tuvo lugar en Varsovia. Según los organizadores, asistieron unas 80.000 personas.
«Descubrir a Dios en lo cotidiano y ordinario es más grande que descubrir América; bendito el que sabe buscar y pedir» -- afirmó el obispo auxiliar de la archidiócesis de Varsovia, Michał Janocha, que intervino en la procesión de Varsovia.
El Obispo Janocha también se dirigió en ucraniano a las numerosas madres ucranianas con hijos en Varsovia. «Les deseamos a ustedes y a su patria una paz más fuerte que la guerra. Les deseamos a ustedes y a su patria una esperanza que es más fuerte que la muerte. Gloria a Ucrania» -- enfatizó el clérigo. Este año, en Varsovia, los villancicos se cantaron en polaco y ucraniano. Como parte del refrigerio, se distribuyeron platos ucranianos de Nochebuena.
La pareja presidencial dirigió unas palabras de saludo a los participantes en las procesiones en Polonia y en el extranjero. El Presidente Duda destacó en una carta especial que las Procesiones contribuyen a revivir y popularizar las tradiciones polacas de representación de la Navidad en las calles y de villancicos en el siglo XXI, y refuercen así la identidad y los lazos familiares manifestando con valencia la fe cristiana en las calles y plazas de las ciudades polacas.
Una de las novedades de este año fue la posibilidad de enviar cartas escritas por los niños al Niño Jesús en el establo de Belén. El 2 de febrero se celebrará una misa por las intenciones contenidas en estas cartas.