(Agencias/InfoCatólica) Después de ocho años persiguiendo a los colegios de educación diferenciada, la socialista Francina Armengol dejará de subvencionarlos definitivamente el próximo curso 2022-2023.
El Consejo de Gobierno ha aprobado un decreto de conciertos educativos que deja fuera a los centros que elegidos por los padres han decidido por ese modelo educativo. Con el amparo de la nueva ley educativa socialista, la Lomloe. La medida afecta al centro Aixa-Llaüt de Palma, el único que mantiene este modelo en Baleares.
Este centro, promovido por padres y cuya dirección espiritual está encomendada al Opus Dei, ganó varias sentencias judiciales que le han permitido mantener el concierto gracias a la legislación anterior. Sin embargo, el actual concierto finaliza este curso y, de renovarse, se enmarcará por primera vez dentro de la llamada 'Ley Celaá', que obliga a cumplir los requisitos de igualdad y convivencia en las aulas y descarta la segregación por sexos.
A partir de enero la dirección de este colegio, que forma parte de la Institución Familiar de Educación, deberá pedir la renovación del concierto educativo de 2,4 millones de euros que mantiene con el Ejecutivo autonómico y que caduca en septiembre. Este diario se puso en contacto sin éxito con el centro, que tampoco se ha pronunciado.
El concierto a los colegios Aixa y Llaüt se hizo en cumplimiento de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB), que reconoció el derecho de concierto a los centros con educación diferenciada, después de que el anterior Pacte de Progrés del socialista Francesc Antich lo denegara.
El Govern del popular José Ramón Bauzá acató las resoluciones judiciales pero el nuevo Ejecutivo formado por los partidos de izquierda puso la lupa en las plazas concertadas y durante todos estos años ha intentado asfixiarlos económicamente, tanto en primaria como en secundaria.