(NCRegister/InfoCatólica) Un informe publicado el 20 de septiembre afirma que el obispo Bode gestionó mal los casos de abusos en la diócesis de Osnabrück, en el noroeste de Alemania, que dirige desde 1995.
El informe provisional de 600 páginas se titula «Violencia sexual contra menores y vulnerables por parte del clero en la diócesis de Osnabrück desde 1945».
Según el informe, en las primeras décadas de su mandato, el obispo Bode mantuvo «repetidamente» en su cargo a personas acusadas de abusos o las nombró para otros puestos, incluidas las tareas de gestión de la pastoral juvenil.
«Soy responsable de esto, también del sistema en la diócesis», dijo el obispo Bode en un comunicado el martes
«Había querido este informe provisional para que la verdad también saliera a la luz lo antes posible», dijo. «Ahora estoy muy preocupado por lo ciegos que hemos sido en realidad y lo ciego que he sido yo por el sufrimiento y las perspectivas de los afectados».
En una rueda de prensa celebrada el jueves, el obispo Bode dijo que había consultado con sus colaboradores y que, en lugar de dimitir, «había decidido hacer todo lo posible durante el resto de mi mandato y asumir las tareas y los deberes de seguimiento, que ya muestra el informe provisional, y también hacer frente a los resultados del informe final», informó CNA Deutsch, socio informativo de CNA en lengua alemana.
El obispo, de 71 años, es vicepresidente de la conferencia episcopal alemana desde 2017. También es vicepresidente del Camino Sinodal Alemán. Un sínodo que, dijeron, que se puso en marcha precisamente para abordar los casos de abusos, algo que se está demostrando que era una excusa para querer imponer cambios doctrinales contrarios a la fe católica.
Precisamente Mons. Bode es uno de los principales impulsores de esa revolución heterodoxa, pues ha apoyado públicamente el acceso de las mujeres al sacramento del orden y el desarrollo de una ceremonia de la Iglesia para bendecir las uniones del mismo sexo.
Se espera que el informe final del estudio sobre los abusos, que está realizando la Universidad de Osnabrück por encargo de la diócesis, se haga público en septiembre de 2024.