(BLes/InfoCatólica) Recientemente, el 25 de agosto, Disney ha lanzado una nueva serie animada llamada «Little Demon», ya disponible para el público. No se trata de una producción infantil: la serie es para adultos, y su temática ha dejado impactados a muchos, iniciando por su sinopsis, la cual ya está disponible en su página de Wikipedia, donde se puede leer:
«Trece años después de haber sido embarazada por Satanás, una madre reacia, Laura, y su hija del Anticristo, Chrissy, intentan vivir una vida ordinaria en Delaware, pero son constantemente frustradas por fuerzas monstruosas, incluido Satanás, que anhela la custodia del alma de su hija».
La agenda demoniaca que Disney ha optado por tomar no es ningún secreto, pues todo lo han explicado abiertamente.
Uno de sus principales creadores, Seth Kirschner, confirmó que se incluirán escenas de desnudos y, textualmente, dijo: «Vamos a seguir adelante hasta que nos digan que no».
A esto se le suma que la serie ha tomado una gran popularidad ya que cuenta con la participación del famoso actor Danny Devito para la voz de Satanás y con Aubrey Plaza para la voz de la protagonista.
Aubrey, durante las entrevistas promocionales de la serie, afirmó mientras sostenía un tridente rojo entre sus manos: «Amo el hecho de que estemos normalizando el paganismo, laura es una bruja que practica el paganismo».
Y, esto no era suficiente pues, además, la serie está planteada con perspectiva de género.
En el tráiler oficial podemos observar a Chrissy, el anticristo, llegando a su escuela secundaria, donde en un cartel se lee «ya no somos racistas». Después, Satanás se percata de que su hijo no es varón como siempre creyó, sino mujer, y afirma que «el futuro es femenino».
Asimismo, se pueden observar escenas donde la joven es felicitada por insultar a su madre, Laura, y paralelismos satíricos entre la Biblia y medios de comunicación, así como banderas transexuales.
El horror ha inundado a numerosas personas alrededor de todo el mundo. En internet, podemos leer críticas como «Los productores y todos los involucrados en esta producción deben arrepentirse. (...) La maldad absoluta a la que se está convirtiendo nuestra cultura, al permitir y tratar de creer que cualquier cosa demoníaca y satánica es 'segura' o 'no es tan importante’».
Incluso, el grupo de padres cristianos «1milmoms» se unieron para recaudar firmas exigiendo a Disney que cancele la serie; actualmente, ya cuentan con más de 20 mil firmas.
Mike Johnson, representante republicano de Luisiana, EE.UU., publicó una extensa y fuerte crítica en la página de Facebook oficial de la serie, donde afirma: «No pude llegar al control remoto lo suficientemente rápido para proteger a mi hijo de 11 años de la vista previa, y me pregunto cuántos otros niños estuvieron expuestos a él, y cuántos millones más sintonizarán la nueva serie, propia y comercializada por Disney. Disney y FX han decidido abrazar y comercializar lo que es claramente malvado, mantente lejos de eso».