(KathPress/InfoCatólica) Con decenas de miles de participantes de todo el mundo, el «Mladifest» que se celebró esta semana en Medjugorje es uno de los mayores acontecimientos católicos, y la participación de Austria es impresionante: Alrededor de 1.000 de los jóvenes peregrinos proceden de la República Alpina, por lo que el rojo-blanco-rojo en el mar de banderas en la zona al aire libre frente al altar exterior de la iglesia es uno de los más vistos, junto con las banderas de Croacia, Italia, Polonia, Rumanía y Ucrania.
Hablan dos monjas de Ucrania, es muy bonito el testimonio.
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Además de los viajes organizados por las parroquias y los particulares, muchas iniciativas juveniles eclesiásticas de Austria acudieron en autobús al lugar de peregrinación en Bosnia-Herzegovina. Los grupos implicados dijeron que el número de participantes era «tan alto como antes» de la pandemia.
Un autocar del monasterio de Kremsmünster estaba limitado a 56 pasajeros, y las plazas reservadas con el límite de edad superior de 35 años se ocuparon inmediatamente después de iniciarse la inscripción, dijo Frater Konrad.
Pte. de La Fundación Oriol, junto a su bella familia, nos envían un saludo desde el Stand de la Fundación Centro Medjugorje.
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El monasterio benedictino lleva organizando viajes al festival de la juventud desde 2007. Como en años anteriores, el abad Ambros Ebhart, máximo representante del clero austriaco, estará presente para ofrecer orientación espiritual.
Así como el núcleo del grupo de Kremsmünster proviene del grupo de oración juvenil «Treffpunkt Benedikt» de esa ciudad, muchos del grupo de la fundación Heiligenkreuz también escucharon la invitación al Mladifest en la «Vigilia de la Juventud» mensual de esa ciudad. Otros son estudiantes de la universidad, pero también jóvenes y religiosos del monasterio de Neuzelle (Alemania).
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Dos autobuses con un total de 100 personas formaron el grupo de viaje del «Regnum Christi», y también aquí austriacos y alemanes hicieron el viaje juntos. Una joven llamada Teresa, de 16 años, está en Medjugorje por segunda vez, después de haber disfrutado de la experiencia del Festival de la Juventud del año pasado. «El programa vespertino es impresionante todos los días, especialmente la oración común en tantas lenguas, así como el devoto silencio de tantas personas durante la adoración y la veneración de la cruz», comparte como testimonio.
En su ciudad natal, Viena, la joven católica es miembro del equipo del centro «Juan Pablo II» de la orden religiosa de los Legionarios de Cristo y es colaboradora para la organización de eventos.
También desde Viena viaja la «Comunidad de Discípulos» y, de igual forma, en este caso la capacidad máxima del autobús de 60 personas determina el tamaño del grupo. La mayoría de los participantes tienen entre 14 y 25 años, incluido Matthias, de 18.
El martes, Matthias tuvo la tarea de llevar la bandera austriaca en la celebración mariana después de la misa vespertina, un «gran honor», como él mismo sintió: «Los representantes de 70 países caminaron entre las filas de invitados al festival que cantaban con su bandera detrás de la estatua decorada de María. El mundo entero está unido en Medjugorje y seguir a María para que nos lleve a Jesús debería expresar eso». El ambiente del festival fue una «bomba», el resultado «un gran impulso», fue la impresión del joven. «Aquí puedes sentir literalmente la fe, definitivamente quieres llevarla contigo y transmitirla en casa».
Los «Lorettos», que están presentes en el Encuentro de Jóvenes de Medjugorje con grupos de Salzburgo y Viena, también están entre los fijos del Festival de la Juventud. La mayoría de los participantes tienen entre 20 y 25 años, «muchos de los que han venido una vez quieren volver a hacerlo. Alrededor de un tercio viene por primera vez», informó Martina desde Viena. Para la joven de 27 años, las charlas sobre la fe y los testimonios han sido uno de los aspectos más destacados hasta ahora.
Sin embargo, los numerosos encuentros con otros jóvenes, como con las jóvenes de Ucrania, también fueron memorables. «Nos contaron sus vidas: todas las mujeres que han huido y que ahora rezan en Medjugorje por sus maridos y novios en el frente. Les prometimos que también rezaríamos por ellos». Del mismo modo, las conversaciones profundas y las «peticiones de oración» surgen a menudo en las colas para ir al baño o para confesarse.
El movimiento «Kisi-Kids», que está representado en toda Austria, también está en Medjugorje con un grupo, al igual que la «Información sobre la fe católica» y la «Familia de María», en cuyo autobús de 50 pasajeros viajaron «no sólo los jóvenes, sino también los jóvenes de corazón de todas las edades», como explicó la tirolesa Benigna, una joven de 17 años, quien se mostró especialmente entusiasmada por el hecho de que en el "Mladifest" se experimenta el compañerismo con jóvenes de todo el mundo.
Oraciones y conversaciones de paz
El Festival Internacional de la Juventud de Medjugorje («Mladifest») se celebra cada año del 1 al 6 de agosto, este año por 33ª vez. Catequesis, testimonios y un programa intensivo de oración por las tardes determinan el programa. El lema de este año, «Aprende de mí y encontrarás la paz», se centra en la búsqueda de la paz.
El organizador es la parroquia de Medjugorje, cerca de la ciudad de Mostar, dirigida por la orden franciscana, desde la que se registran apariciones marianas desde 1981. El Vaticano, que aún no se ha pronunciado sobre la autenticidad de las apariciones, está presente en el encuentro de jóvenes con, entre otros, el arzobispo visitador del Papa, Aldo Cavalli, y representantes de la Nunciatura de Bosnia-Herzegovina.
