(CatholicWeekly/InfoCatólica) Una película sobre la increíble vida de uno de los santos más queridos de la iglesia ortodoxa griega, San Nektarios (o San Nectarios), llegó a Sydney esta semana y ya está siendo utilizada para ayudar a las personas de todo el estado cuyos medios de vida se vieron afectados por las recientes inundaciones.
La parroquia ortodoxa griega de San Nectarios, en Burwood, ha recaudado más de 5.000 dólares gracias a las proyecciones privadas de Man of God; el 50% de los fondos se destinará a la Cruz Roja Australiana y el 50% restante al Banco de Alimentos.
La película se centra en el humilde obispo de Egina (Grecia) que, a pesar de la persecución de los superiores religiosos, se dedicó a los pobres y a las buenas obras hasta su muerte en 1920.
Reconocido oficialmente como santo por el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla en 1961, se le atribuyen miles de curaciones de enfermedades terminales en todo el mundo.
La película está escrita y dirigida por Yelena Popovic y cuenta con un reparto estelar que incluye a Mickey Rourke.
«San Nektarios es un increíble santo moderno», dijo el párroco P. George Liangas. «Es muy querido como hombre de virtud y hacedor de milagros, y no sólo por los ortodoxos. Gente de diferentes denominaciones de todo Sydney viene a venerarlo. La película hace muy buena justicia a su vida, sin glamourizarla».
La Sra. Popovic dijo a The Catholic Weekly, en una entrevista vía Zoom, que la película había sido bien recibida por todas las confesiones cristianas, así como por los no creyentes, ya que la historia del santo es una con la que cualquiera puede identificarse.
«Habla a todas las confesiones sobre la fe, sobre un hombre bueno que fue perseguido injustamente y cómo respondió a ello, y todo el mundo puede sentirse identificado con eso porque todos sufrimos injusticias en algún momento», dijo.
Aris Servetalis, que interpreta al santo griego de la vida real San Nektarios con Aleksandr Petrov como su protegido Kostas en una escena de «Man of God». Imagen cortesía de Movies Change People
«San Nektarios era un hombre de gran humildad y creo que es una virtud que no sólo se ha perdido, sino que se malinterpreta mucho y se toma como una debilidad hoy en día».
Habiendo crecido en una familia no religiosa en Belgrado, Yelena dijo que nunca imaginó que dirigiría una película sobre un santo que obtendría distribución y aclamación mundial.
«Después de encontrar el camino de la fe, siempre sentí que había alguien que me cuidaba, un Padre que se preocupaba por mí, y esa fe me ayudó a superar los obstáculos y las dificultades de aquella época», dijo. Más tarde, tras el nacimiento de su primer hijo, que una amiga la animó a ir a la iglesia y unirse a una comunidad de fe.
«Fue entonces cuando hice mi primera comunión y confesión y experimenté algo entonces, una presencia de la gracia, que nunca olvidaré. Para mí, la fe es como comer, o beber agua, eso es lo que son para mí los sacramentos. La fe no es sólo una teoría, es una realidad».
La directora de origen serbio dijo que la lectura de una biografía de San Nektarios después de la primera misa anual en memoria de su padre fallecido en 2012 le dio un «deseo ardiente» de hacer una película sobre el santo.
«Mi propio padre no creía en Dios, pero era un hombre muy honorable, y creo que me facilitó creer en Dios más adelante en mi vida», dijo. «He leído muchas veces los libros de los santos y para mí son inspiradores y una fuente de fuerza porque sus vidas son a menudo muy difíciles, pero mantuvieron una fe y un amor increíbles por todo el mundo y estuvieron dispuestos a sacrificarse».
«Sin la ayuda de Dios esta película no se habría realizado. Para mí ha sido una experiencia de que mientras haga lo mejor que pueda para asegurarme de que estoy en el camino correcto, Dios se encargará del resto e incluso te dará más de lo que esperabas. Él tiene un plan para ti que es mejor de lo que podemos imaginar ahora mismo, si él es tu foco principal no puedes fallar».
«Ha tenido las críticas más increíbles, y más que eso, creo que es una historia con cualidades muy curativas. La gente me ha dicho que sale de ver la película con una nueva esperanza, que se siente de forma diferente ante la vida».
Man of God se estrenó de forma limitada el 2 de junio en Event Cinemas Burwood y otros cines australianos.
