(LifeNews/InfoCatólica) La ley de Oklahoma es al estilo de la de Texas que incluye el derecho a que personas particulares denuncien la realización de abortos, pero en lugar de proteger a los bebés a las seis semanas, cuando se puede detectar su latido, como hace la ley de Texas, comienza a proteger a los niños no nacidos en la concepción, cuando comienza su vida. La prohibición del aborto en Texas ha estado en vigor durante más de 260 días y ha salvado de los abortos a 17.000 o más bebés.
En su mensaje durante la ceremonia de la firma, el gobernador Stitt dijo:
«Prometí a los habitantes de Oklahoma que, como gobernador, firmaría todas las leyes provida que pasaran por mi mesa, y me siento orgulloso de cumplir esa promesa hoy. Desde el momento en que la vida comienza en la concepción es cuando tenemos la responsabilidad como seres humanos de hacer todo lo posible para proteger la vida de ese bebé y la vida de la madre. Eso es lo que creo y lo que cree la mayoría de los habitantes de Oklahoma. Si otros estados quieren aprobar leyes diferentes, están en su derecho, pero en Oklahoma siempre defenderemos la vida».
Las cuatro empresas abortistas de Oklahoma han dicho que dejarán de matar bebés en los abortorios una vez que el gobernador Stitt firme la ley. Eso significa que cientos, si no miles, de bebés estarán protegidos del aborto.
Oklahoma está lista para una prohibición aún más contundente del aborto si se confirma el mes que viene la anulación de la sentecia Roe v Wade por parte de la Corte Suprema de los EE.UU.
«¿Es nuestro objetivo defender el derecho a la vida o no lo es?» preguntó a sus colegas la representante republicana de Collinsville, Wendi Stearman, que patrocinó el proyecto de ley.
«Esta es una oportunidad para salvar a más habitantes de Oklahoma. Espero que veamos una buena decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos, pero no podemos esperar hasta entonce», dijo el predidente del Senado de Oklahoma, Greg Treat: «Tenemos que salvar la vida de los no nacidos».
La ley no permite que la denuncia particular se ejerza contra la mujer que aborta, pero sí contra los médicos y resto de personal sanitario que practiquen el aborto. Tampoco se podrá denunciar en caso de que el embarazo sea fruto de una violación o de incesto.