(InfoCatólica) Mons. Argüello ha mostrado su desacuerdo con la aprobación de un nuevo proyecto de ley del aborto por parte del gobierno social-comunista de España:
«La defensa y la promoción de la vida es una de las fuentes de civilización. Es una de las líneas rojas que expresan la salud moral, la esperanza de un pueblo: defender y promover la vida.
Nos parece una mala noticia que hoy el gobierno haya aprobado un proyecto de ley del aborto donde se sigue afirmando el derecho al aborto, el derecho del fuerte sobre el débil, a la hora de eliminar una vida nueva y distinta que existe en el seno de la madre.
Desde que se aprobó la primera ley que trata de regular el aborto, la llamada ley de interrupción de embarazo en nuestro país, los avances de la ciencia nos hacen poder afirmar con toda fuerza que en el seno de una mujer embarazada existe una nueva vida que es preciso cuidar, acoger defender, para lo cual hay que defender a la madre. Para lo cual hay que ofrecer las condiciones también económicas, laborales, de vivienda, de posibilidad de acoger a esta nueva vida que va a dar a luz.
Por eso es tan importante que como sociedad, como Iglesia también, demos un paso adelante en la propuesta de la nueva vida, en la acogida de la nueva vida, en el apoyo a las madres embarazadas que sufren cualquier tipo de dificultad que pudieran hacer entrar en dudas sobre la viabilidad de su embarazo.
Una sociedad que defiende la vida desde el seno de la madre pasando por todas las peripecias vitales, hasta el momento final de la muerte, acogida también como fenómeno que forma parte de la existencia, muestra la salud moral de una sociedad y la esperanza en construir un futuro de bien común».
La nueva ley del aborto retira la obligatoriedad de que las jóvenes de 16 y 17 años pidan permiso a sus padres para abortar. Además pretende garantizar que los hospitales públicos realicen abortos.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, que ha llevado a la reunión el texto junto al Ministerio de Sanidad, ha asegurado en la rueda de prensa posterior que se trata de una norma «que amplía derechos» y «da un paso decidido para garantizar» el acceso al aborto y a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. «Las instituciones asumimos la responsabilidad de dejar atrás los estigmas y prejuicios sobre los cuerpos de las mujeres», ha añadido la ministra.
Por otra parte, la nueva ley prohíbe la gestación subrogada en España, aunque no se perseguirá penalmente a quienes contraten vientres de alquiler en el extranjero.
La ley se tramitará por vía de urgencia para que pueda ser aprobada antes de un posible adelanto electoral. El gobierno sabe que cuenta con mayoría de sobra tanto en el Congreso como en el Senado para sacar adelante el proyecto.