(Kath/InfoCatólica) Tras dos años excepcionales por la pandemia, en Semana Santa vuelve un poco de normalidad al Vaticano. Según el calendario publicado por la Prefectura de la Casa Pontificia, el Papa Francisco ya no celebrará la máxima fiesta del cristianismo solo o en una pequeña comunidad.
De este modo, volverá un punto álgido de las celebraciones santas y pascuales de Roma: el Vía Crucis en el Coliseo el Viernes Santo. Asimismo, Francisco volverá a pronunciar la bendición «Urbi et orbi» desde el balcón de la Basílica de San Pedro el domingo de Pascua el 17 de abril. El Vaticano aún no ha dado detalles sobre la noche del Jueves Santo y las visitas papales a instituciones sociales o penales tradicionalmente asociadas a ella.
La última vez que las velas brillaron en la oscuridad alrededor del Coliseo el Viernes Santo fue en 2019. La pandemia, con sus normas y toques de queda, dejó el gran anfiteatro a oscuras durante los dos últimos años. En cambio, Francisco se apoyó en el simbolismo en la casi vacía Plaza de San Pedro y celebró allí el Vía Crucis. Este año, el Papa volverá a presidir el Vía Crucis en el Coliseo el 15 de abril.
No se sabe si habrá decenas de miles de participantes como en los tiempos anteriores a la pandemia. Todavía no se dispone de información sobre el número de personas que serán admitidas en el Vía Crucis y también en las liturgias de Semana Santa y Pascua en el Vaticano y en qué condiciones.
El Domingo de Ramos que es el 10 de abril, Francisco quiere celebrar la misa en la plaza de San Pedro, y también está prevista la misa crismal con la consagración de los Santos Óleos el Jueves Santo por la mañana en la basílica de San Pedro. Todavía está abierto cómo pasará el Papa la noche del Jueves Santo. Antes de la pandemia, tradicionalmente celebraba oficios en instituciones sociales o cárceles, lavaba los pies a los refugiados y a los presos. Antes del Vía Crucis del Coliseo, el Papa presidirá la liturgia del Viernes Santo 15 de abril en la Basílica de San Pedro.
Francisco celebrará la Vigilia Pascual el 16 de abril en la Basílica, así como la misa del Domingo de Pascua en la Plaza de San Pedro. A continuación, impartirá la bendición «Urbi et orbi» desde el balcón de la Basílica de San Pedro, como ya hizo la pasada Navidad. En los dos últimos años, los fieles tuvieron que conformarse con una transmisión en directo desde la basílica.