(Fides/InfoCatólica) La Conferencia Episcopal de Etiopía, en un comunicado enviado a la Agencia Fides, han salido al paso de los que se quejaban de que los obispos católicos guardaran silencio sobre el conflicto que estalló en Tigray el 4 de noviembre de 2020.
Los obispos recuerdan sus declaraciones del 6 de noviembre de 2020. del 17 de julio de 2021 y del 16 de diciembre de 2021 (véase Fides 23/12/2021).
La Iglesia católica de Etiopía también se ha movilizado, junto con las Iglesias hermanas de otras partes del mundo, para ayudar a las poblaciones afectadas por la guerra en los estados de «Tigrai, Amhara, Oromia, Afar y Benishangul Gumuz con alimentos y artículos de primera necesidad».
«Como obispos, hemos expresado en varias ocasiones que se nos rompe el corazón al ver a la población sufrir, quedarse sin alimentos», subrayan. «Los obispos aseguran sus oraciones y renuevan su llamamiento para la protección de los derechos naturales y la dignidad de todo ser humano».
«Si la guerra no es eliminada de la historia de Etiopía por nosotros los etíopes, será la guerra la que nos expulse a nosotros los etíopes de la historia», advierten los obispos, que renuevan su llamamiento «a todas las partes implicadas en el conflicto de nuestro país para que abandonen las armas e inicien un verdadero diálogo en interés de la población que les permita vivir en paz».
El conflicto etíope continúa, tal y como informó el 7 de marzo la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien afirmó que «sigue recibiendo informes de violaciones graves y a gran escala de los derechos humanos en el contexto del conflicto que se desarrolla en las regiones de Afar y Amhara, así como en Tigray». Según Bachelet, entre el 22 de noviembre y el 28 de febrero, más de 300 civiles murieron en una serie de bombardeos aéreos en el norte del país.