(ACIPrensa/InfoCatólica) El juicio ante el Tribunal de Helsinki (Finlandia) comenzó el día 24 de enero y los delitos de los que se acusó a Rasanen, que madre de cinco hijos y médico fueron los siguientes: un folleto compartido en 2004, una aparición televisiva en 2018 y un tuit del 2019.
Sin embargo, la diputada de 62 años se declara inocente de los 3 cargos que se le imputan.
En el juicio también se acusa a Juhana Pohjola, obispo de la diócesis de la Misión Evangélica Luterana de Finlandia, cuyos cargos penales se debían a una colaboración en la publicación del folleto anteriormente enumerado, escrito por Rasanen hace 17 años, dentro del cual se menciona la cita bíblica «Hombre y mujer los creó».
Rasanen y Pohjola fueron acusados el 29 de abril del 2021: el fiscal general de Finlandia les inculpó de generar «disturbios étnicos», considerado uno de los «crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad» presentes en el Código Penal del país.
Al iniciar el juicio, la Fiscalía argumentó que las ideas que proponían Rasanen y Pohjola eran discriminatorias y «probablemente causarían intolerancia, desprecio y odio hacia los homosexuales», según informa la plataforma internacional de defensa de la libertad religiosa Alliance Defending Freedom (ADF).
A este respecto, la defensa de Rasanen y Pohjola realizó la petición al tribunal de no imponer interpretaciones teológicas personales de la Biblia a todos los ciudadanos, intentando así condenar las opiniones tradicionales de los cristianos acerca del matrimonio, la familia y la sexualidad. Puesto que, de ese modo, la condena recibida sería debido directamente a la criminalización de los versículos bíblicos.
Rasanen, quien también fue presidenta del Partido Demócrata Cristiano de 2004 a 2015, es miembro de la iglesia luterana de Finlandia y, anteriormente, realizó críticas a través de Twitter a su iglesia por haber patrocinado un evento pro LGBT hace casi 3 años, cuestionando cómo puede ser posible que el patrocinio de dicho evento abrace las enseñanzas bíblicas.
Asimismo, otro de sus cargos se debía a una publicación en Instagram, la cual constaba de una imagen de una página de la Biblia en la que se leía «Por eso Dios dejó que fueran dominados por sus malos deseos, que degradaban sus propios cuerpos. Como cambiaron la verdad de Dios por la mentira, veneraron y adoraron la criatura en vez del Creador —bendito por siempre, amén— […] Lo mismo los hombres: dejando la relación natural con la mujer», perteneciente al texto de la Carta a los Romanos 1, 24-27.
La misma publicación la trasladó también a la red social Facebook.
En la corte, Rasanen explicó que la publicación estaba destinada a los altos mandos de la iglesia luterana finlandesa. Posteriormente, la policía inició investigaciones sobre ella, le realizaron numerosos interrogatorios y después de un año el fiscal general compartió su decisión.
Por otro lado, para el Consejo Luterano Internacional las acciones incriminatorias tomadas hacia Rasanen y Pohjola son «escandalosas» y «la gran mayoría de los cristianos de todas las naciones, incluidos los católicos y los ortodoxos orientales, comparten estas convicciones».
Cuestiona, así, la organización religiosa: «¿Nos condenaría a todos el fiscal general finlandés? Además, ¿debería el Estado finlandés arriesgarse a sanciones gubernamentales de otros estados basadas en el abuso de los derechos humanos fundamentales?»
El tercer cargo, correspondiente a un folleto, es acusado de describir la homosexualidad como un «trastorno del desarrollo psicosexual», dentro de un texto escrito por la diputada Rasanen, en el que plasmaba la enseñanza luterana acerca de la sexualidad, desde su punto de vista político, médico y cristiano. A pesar de ello, Rasanen afirma que dicho folleto ya no tenía validez en la actualidad.
Los argumentos finales en dicha demanda serán presentados el 14 de febrero y, Paul Coleman, el director ejecutivo de ADF International, notificó que, si Rasanen y Pohjola fueran oficialmente condenados, se «establecería un nuevo estándar europeo para los estándares de libertad de expresión» en el continente europeo.