(Agencias/InfoCatólica) La decisión del tribunal significa que el caso volverá a un tribunal de distrito para un nuevo proceso, abriendo la posibilidad de que la ley pueda ser suspendida pronto.
El dictamen permite a los defensores del derecho al aborto impugnar la ley ante los tribunales, lo que les da una pequeña victoria. Pero no permite que los funcionarios estatales puedan ser demandados, lo que podría dificultar que las clínicas abortistas vuelvan a practicar abortos.
De los nueve jueces del Supremo, ocho votaron a favor de permitir que el caso de las clínicas siga su curso en cortes inferiores, mientras que el magistrado conservador Clarence Thomas se posicionó en contra.
El caso volverá a la Corte Suprema
Con casi total seguridad, las cllínicas conseguirán que algún tribunal se posicione contra la ley, ante lo cual el estado de Texas interpondrá un recurso y el caso acabará de nuevo en otra corte de apelaciones, desde donde volverá al Tribunal Supremo.