Miguel D'Escoto es sacerdote secularizado y ex-canciller sandinista

El presidente de la Asamblea General de la ONU asegura que Fidel Castro es el mejor discípulo de Cristo

El actual presidente de la Asamblea General de la ONU, el nicaragüense Miguel D'Escoto, aseguró hoy en La Habana que el líder cubano, Fidel Castro, es «el mejor discípulo de Jesús». «Fidel es para mí, hoy en día, el mejor discípulo de Jesús. Me tocó el privilegio de estar cerca, de observarlo, de oírlo, de verlo, y es un hombre enamorado de la justicia, de la fraternidad, de la solidaridad», dijo el sacerdote y ex canciller sandinista. D'Escoto, hijo de un diplomático nicaragüense, se ordenó como sacerdote en la orden Maryknol, aunque acabó secularizándose para dedicarse luego a la política.

(Agencias/InfoCatólica) D'Escoto insistió en que la ONU tiene que ser "reinventada", al presentar en La Habana su libro "Antiimperialismo y no violencia" ante el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, y el ministro de Cultura, Abel Prieto, entre otros funcionarios.

El jueves dijo que vio con "excelente salud física, espiritual y anímica" al líder cubano, de 83 años, que dejó la Presidencia y no aparece en público desde 2006, aunque los medios de comunicación oficiales divulgan con frecuencia vídeos y fotos suyas.

Sacerdote secularizado y ex-canciller sandinista

Miguel D'Escoto Brockmann, sacerdote católico secularizado y ex-canciller sandinista,  fue electo a primeros de junio del 2008 como presidente de la Asamblea General de la ONU para la 63ª sesión anual que se inicia en setiembre.

La elección tuvo lugar por consenso de los 192 Estados miembros en la gran sala de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York.

D'Escoto, de 75 años, reemplazó en el cargo al diplomático y ex ministro macedonio Srgjan Kerim. El cargo de presidente se atribuye anualmente por rotación entre los diferentes grupos geográficos representados en la ONU.

La candidatura de d'Escoto fue objeto de un consenso en el Grupo de América Latina y el Caribe, GRULAC.

Nacido en Los Ángeles (California), D'Escoto es hijo de un diplomático nicaragüense. Tras ser ordenado sacerdote de la orden Maryknol, se dedicó luego a la política. Miembro del Consejo mundial de iglesias, fue un simpatizante de la teología de la liberación.

D'Escoto fue canciller de Nicaragua durante el primer gobierno sandinista, de 1979 a 1990. Actualmente es asesor del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.

 

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12 comentarios

Foix
Igualito, igualito que Cristo.
5/09/09 8:03 PM
Guillermo
D'Escoto: yerras de arriba abajo. Castro no es discípulo de Cristo, pero tú sí lo eres de Judas.
5/09/09 8:55 PM
José
Veo a Fidel Castro mas cerca de Jesús que Bush o Aznar. Aunque ya veremos el último día a quien dice el Señor: "ven bendito de mi Padre ...". Seguro que hay sorpresas.
6/09/09 9:04 AM
Luis Fernando
Sí, José, no hay duda de que el tipo que ha hundido en la miseria a toda Cuba durante medio siglo es mejor que Aznar.
¿Quién puede decir lo contrario?
6/09/09 9:24 AM
rastri
Bueno Fidel debe hacer honor a su nombre que deriva en fidelidad. El dilema está en saber a quién le debe de ser fiel Fidel: Si a la "Patria o Muerte" que Muerte de la Patria es.
¿O a quién,..?
6/09/09 11:38 AM
Maricruz
Como dicen en mi país: "que sigan durmiendo de ese lado".

Ya quisiera yo -en mi soberbia y estupidez que se bien que no me faltan- haber presenciado que Cristo se hubiese impuesto, como Fidel lo ha hecho, a la conciencia del género humano.

Vaya barrabasada lo que ha dicho este señor!
6/09/09 3:30 PM
Diego D G
Al menos Fidel procuró que a ningún niño se le inchase la barriga como en Argentina o Brasil y no digamos otros paises que más parecian africanos. Les recuerdo a los que no tienen memoria o tienen memoria de un zapato, que un general fué fusilado por traficar con drogas. Les recuerdo que cuba fué sometido a un embargo y continua hasta ahora.
6/09/09 5:37 PM
Luciano
En Cuba sobra la comida:
http://www.youtube.com/watch?v=tLLAh2yTqu0

Y los tiburones del Caribe también están muy felices con Castro. Han podido comer carne fresca de cubanos que buscaban huir de la cárcel en la que el Coma-andante convirtió la isla
6/09/09 7:08 PM
Hypatia
Debería, Miguel o el articulista, explicarlo algo mejor, poner fundamento a la afirmación para mejor entendimiento de los lectores. Fidel es un iluso que parece creer en la "fantasía igualitaria".
6/09/09 8:21 PM
azteque
jajajajajajajaja
6/09/09 8:26 PM
Ezequiel
Que un dictador como Castro sea fiel discípulo de Cristo con el mal que ha hecho en su país.. me parece que al D'Escoto le faltan caramelos en el tarro
7/09/09 12:24 AM
luis alberto henríquez lorenzo
"¿Ser ateo implica necesariamente ser autoritario y dictatorial?"


Lo que me sorprende más del reciente y controvertido comentario del actual presidente de la Asamblea General de la ONU, el nicaragüense Miguel D'Escoto, no es tanto el elogio o panegírico que regala al "bueno" de Fidel Castro, ateo confeso (ya se sabe, materialista, dialéctico, marxista y todo eso) o siquiera agnóstico ahora en su senectud, cuanto que esos elogios están dichos a un dictador que -con independencia de cuál sea su verdadera intención para con su pueblo y la humanidad, cosa que solamente DIOS conoce y de la que, por cierto, la Historia, ni siquiera escrita con mayúscula, podrá absolverlo- mantiene "objetivamente" oprimida a Cuba, la llamada "perla del Caribe".
Que ha habido millares de hombres y mujeres buenos desde las filas del socialismo, del comunismo incluso, aunque especialmente desde el anarquismo, es una verdad histórica que nadie puede ni debe negar. Ahí tenemos la no poco heroica historia del movimiento obrero para corrobar una obviedad tal. Ciertamente, en su inmensa mayoría esos esforzados hombres y mujeres fueron en su mayoría ateos.
Ahora bien, ¿se puede ser dictador y a la vez libertador? ¿Se puede ser libertario y a la vez autoritario? Personalidades ateas y libertarias (es decir, no marxistas, no autoritarias y sí hijas del pueblo, de la cuna a la sepultura) como Angel Pestaña, Juan Peiró, Juan Saña, Cipriano Mera y Salvador Seguí, por sólo citar a cinco, ¿qué pensarían ante un dictador autoritario, valga la redundancia, como el cubano Castro? Sin duda alguna, algo muy distinto a lo que acaba de decir el marxistizoide Miguel D'Escoto.
En algún lugar he leído que la figura (figura física incluso) del célebrer anarquista andaluz Fermín Salvochea -que siendo rico renunció a todo, en plan Francisco de Asís-, tenía una especie de aureola mística. Y eso que era ateo. Pero fue un luchador que, en un proceso creciente y siempre considerándose un hijo del pueblo, creó instrumentos de liberación para la clase obrera, es decir, para los pobres. Y es que Fermín Salvochea fue un libertario. (Aunque ojo, con estas apreciaciones mías no estoy afirmando, para nada, que en el llamado movimiento libertario todo fuera idílico, justo y humano, ni muchísimo menos.)
Por contra Fidel Castro, ¿qué instrumentos de liberación del pueblo y para el pueblo ha creado, a lo largo y ancho de medio siglo, Fidel Castro? El comandante Castro no ha dudado en reprimir, como buen marxista totalitario que fue y que es, los grupos de humanistas, izquierdistas y cristianos disidentes con su línea oficial. Juan Peiró y Juan Saña, ateos confesos y sobre todo libertarios, no dudaron en intervenir para salvar a todas las monjas de un convento de Barcelona, en plena y atroz persecusión religiosa durante la Guerra Civil española.
En consecuencia, ya digo que lo que me sorprende es que esos elogios sean para el dictador y por ende autoritario Fidel Castro ( además, materialista y marxista) y no para tantos miles y miles de esforzados militantes ateos pero militantes de la solidaridad, de los derechos humanos, de la democracia autogestionaria, del Ideal. Desde luego, puede que Castro crea en todo lo anterior, pero miren por dónde nunca ha demostrado creer en ello sino más bien en todo lo contrario: en realidad, lo que ha demostrado es que desprecia la libertad, la democracia (sea autogestionaria o burguesa), los derechos humanos, la justicia misma (entendida esta en claves cristianas o libertarias).
En realidad, no me sorprende que Miguel D'Escoto haya pronunciado esos elogios, pues Miguel D'Escoto podrá saber mucho de teología, de diplomacia, de regímenes marxistas o de jardinería incluso, pero de libertad y de democracia autogestionaria y de libertarismo, me huele que debe saber muy poco, a tenor de su trayectoria.
LUIS ALBERTO HENRÍQUEZ LORENZO
8/09/09 12:18 AM

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