(Agencias/InfoCatólica) En verano el demócrata seguía claramente por delante en las encuestas, pero la elección pasó a considerarse desde hacía semanas como un referéndum sobre el presidente estadounidense Joe Biden y como un indicador muy importante para las próximas elecciones de mitad de mandato dentro de un año.
Virginia ha sido considerada durante mucho tiempo como un bastión demócrata, y su pérdida puede marcar el principio del fin del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y de su agenda anti-vida. Hasta ahora ha estado gobernada por el político radical pro-aborto Ralph Northam, quien hace meses llegó a decir que los padres deberían incluso decidir si los niños que han sobrevivido a un aborto deben ser autorizados a vivir. Por lo tanto, abogó de facto por el asesinato de los recién nacidos.
Sin embargo, el republicano se ha manifestado en varias ocasiones en contra de financiar los abortos con el dinero de los contribuyentes y también se considera partidario de la «Ley de Protección del Niño por Nacer Capaz de Sentir Dolor», por la que se prohíbe el aborto desde el momento en que el feto puede sentir dolor.
Trump, contento
Por su parte, el expresidente Donald Trump se ha regodeado tras conocer los primeros resultados y ha manifestado que «la campaña de Terry McAuliffe conta cierta persona llamada 'Trump' ha ayudado mucho a Youngkin»
«¡Todo lo que McAuliffe hizo fue hablar de Trump, Trump, Trump y perdió! (...) Ni siquiera tuve que ir a apoyar Youngkin, porque McAuliffe lo hizo por mí. ¡Gracias a los votantes del MAGA por ser grandes!», ha dicho.