(Zenit/InfoCatólica) Los resultados demuestran que, entre quienes suelen asistir a servicios de la Iglesia, la mayoría ha participado en ellos de manera presencial últimamente. De los adultos estadounidenses, un 26% afirma haber acudido en persona a servicios religiosos (en el tiempo previo a la encuesta, del 20 al 26 de septiembre). Al compararlo con el porcentaje de personas que, en marzo del 2021, afirmaron haber participado en persona, hallamos que representa un incremento del 17%, y uno del 13% entre quienes lo hicieron en julio del 2020.
En los nuevos reportes, se da a conocer que un 28% de los estadounidenses ha participado de los servicios religiosos virtuales en el último mes, siendo esta una pequeña disminución desde marzo 2021, cuando los utilizaba el 33% y desde julio de 2020, un 36%.
Dentro del grupo de adultos estadounidenses que asisten a actividades de la iglesia mínimo una vez al mes, quienes han mantenido su participación en estas dentro de la modalidad virtual han disminuido a lo largo de las tres encuestas, de un 72% a un 65% y, finalmente, a un 55%.
Del mismo modo, el regreso a la modalidad presencial incluye consigo todos los cuidados necesarios respecto a bioseguridad. A pesar de que las restricciones están disminuyendo, los cuidados principales se mantienen.
El 59% de los fieles que asisten a su casa de culto, afirman que las precauciones contra el covid-19 siguen en práctica. Solo un 6% de este grupo informa que su congregación permanece cerrada en su totalidad para servicios en persona, un descenso notable dado que esto mismo lo afirmó un 31% en julio del 2020 y un 17% a inicios del 2021.
Por otro lado, es más común ver que dentro de iglesias cristianas que pertenecen a la tradición protestante evangélica las restricciones frente al coronavirus son menores, según informa un 49% de sus propios integrantes.
Asimismo, los participantes religiosos blancos tienen más tendencia que los congregantes negros e hispanos a decir que sus centros de culto han regresado a las actividades presenciales (38% frente a 16% y 20%, respectivamente).
Los republicanos y quienes se inclinan al Partido Republicano, también suelen afirmar con más frecuencia que sus centros religiosos están abiertos sin restricciones. A pesar de esto, 1 de cada 10 de cualquiera de los grupos mencionados anteriormente, asegura que su casa de culto permanece cerrada por completo a la modalidad presencial.