(CP/InfoCatólica) Cornerstone (North East) Adoption and Fostering Service, también conocida como CornerstoneUK, planea apelar la sentencia del viernes pasado que dictamina que el grupo podía limitar las familias con las que trabaja a cristianos evangélicos, pero no podía exigir que sea parejas formadas solo por heterosexuales.
La cuestión es que la práctica totalidad de los cristianos evangélicos, a diferencia de los protestantes liberales, solo aceptan el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer, y creen que las relaciones entre personas del mismo sexo son, tal y como enseña la Biblia, pecaminosas y contrarias a la ley natural.
El panel de tres jueces del Tribunal de Apelación confirmó una sentencia de un tribunal inferior contra Cornerstone. El Christian Institute ha prometido llevar el caso al Tribunal Supremo del Reino Unido.
«La dificultad de esta lógica es que equipara la discriminación religiosa con la discriminación por orientación sexual en todas las circunstancias, cuando eso es algo que el Parlamento no ha hecho», afirma la sentencia.
«El Parlamento, en términos generales, ha optado por dar prioridad a la fe religiosa en un contexto privado, no por dar prioridad a la orientación sexual cuando se trata de servicios públicos, siempre sujeto a consideraciones de proporcionalidad en el caso individual».
Simon Calvert, del Christian Institude, que está prestando ayuda legal a Cornerstone, dijo el lunes a The Christian Post que el Tribunal de Apelación «concluyó erróneamente que» Cornerstone estaba «discriminando ilegalmente por motivos de orientación sexual»
«El Tribunal declaró erróneamente que Cornerstone contrata a cuidadores en nombre de las autoridades locales y, por tanto, no puede acogerse a las excepciones de la ley de igualdad creadas para las organizaciones religiosas», explicó Calvert.
«Estas excepciones protegen su capacidad de hacer distinciones por motivos de orientación sexual sin caer en la ley de discriminación. El hecho crucial es que Cornerstone contrata a los cuidadores en su propio nombre, no en el de las autoridades locales».
En 2019, la Oficina de Estándares en Educación, Servicios Infantiles y Habilidades (OFSTED) del gobierno emitió un informe sobre Cornerstone en el que concluía que la agencia evangélica era «inadecuada» debido a su política de colocar a los niños solo con parejas casadas heterosexuales que están de acuerdo con la declaración de fe de la organización.
Según la OFSTED, esta política significaba que Cornerstone no cumplía con la Ley de Igualdad de 2010 y la Ley de Derechos Humanos de 1998.
Cornerstone impugnó la designación, argumentando que la organización benéfica cumplía los requisitos para obtener exenciones en virtud de la legislación británica y que su negativa por motivos religiosos a colocar a los niños con parejas del mismo sexo estaba justificada.
En la sentencia del pasado viernes, el Tribunal de Apelación sostuvo que si «el argumento de Cornerstone fuera correcto, podría aprovecharse de las partes de la legislación que la protegen e ignorar las partes que protegen a los demás».
La directora general de Cornerstone, Pam Birtle, dijo en un comunicado difundido por The Christian Institute que, aunque estaba «decepcionada» por el fallo, cree que su organización «ganó más de lo que había perdido.»
«El intento del Ofsted de decirnos que no podíamos trabajar exclusivamente con cuidadores cristianos fue rechazado por el Tribunal Superior y ha sido rechazado aún más firmemente por la sentencia del Tribunal de Apelación de hoy», declaró Birtle.
«Estamos convencidos de que la ley de igualdad protege nuestra capacidad de actuar de forma claramente evangélica. Si la ley hiciera algo menos, sería una violación de los derechos humanos y una negación de los valores de una democracia liberal».