(RevistaEcclesia/InfoCatólica) En el marco de la celebración del Encuentro Europeo de Jóvenes, que debió haberse llevado a cabo este fin de semana, Raúl Tinajero, Director de la Subcomisión para la Juventud y la Infancia de la Conferencia Episcopal Española se dirigió a todos para animarlos e invitarlos a participar en la Peregrinación Europea de Jóvenes a Santiago en agosto de 2022.
«Es un encuentro para lanzar la Peregrinación Europea de Jóvenes 2022, ya que justamente este fin de semana hubiera sido el Encuentro Europeo de Jóvenes. A consecuencia de la pandemia se tuvo que retrasar al prorrogarse el Año Santo. Es un acto significativo, simbólico y de lanzamiento, que tendrá varias partes. Peregrinaremos un breve trayecto hasta Obradoiro siempre que nos respete la lluvia. Estaremos acompañados de autoridades como el arzobispo de Santiago, el alcalde de la ciudad y el vicepresidente de la Xunta de Galicia. En el acto va a haber representantes de la JMJ de Lisboa, de la Conferencia Episcopal Portuguesa y de la Conferencia Episcopal Italiana, que le dará ese toque europeo a la celebración. La idea es hacer el acto en la escalinata, pero a ver si nos deja la lluvia, ya que las previsiones no son muy favorables.
Tras el acto de presentación, el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, oficiará una misa en el interior de la Catedral para los asistentes. Ya en la tarde se realizarán diversas actividades de formación y también habrá un concierto de Rubén De Lis, autor del himno de la Peregrinación Europea de Jóvenes.
En teoría deberíamos estar celebrando la peregrinación estos días. No ha podido ser este año, pero tenemos muchas ganas del año que viene. Aquí en Santiago ya se ve movimiento, están viniendo peregrinos, gente que se anima a hacer el Camino y queremos invitar a los jóvenes a que vengan el año que viene a ese encuentro con jóvenes de toda Europa».
El año pasado el Papa envió un mensaje al arzobispo de Santiago de Compostela, Monseñor Julián Barrio Barrio, invitando a todos a participar en la peregrinación con estas palabras:
«Siguiendo las huellas del Apóstol salimos de nosotros mismos, de esas certezas a las que nos aferramos, pero con una meta clara en mente, no somos seres errantes, siempre girando alrededor de nosotros mismos sin llegar a ninguna parte. Es la voz del Señor que nos llama y, como peregrinos, la acogemos en actitud de escucha y búsqueda, emprendiendo este viaje de encuentro con Dios, con los demás y con nosotros mismos».