(LifeNews/InfoCatólica) TwentyTwo Matters, un grupo dedicado a defender a los bebés muy prematuros, compartió esta semana la desgarradora historia de una madre cuya hija murió después de que ella dijo que el hospital decidió que el bebé era demasiado pequeño para sobrevivir.
Gracias a la medicina moderna, los bebés prematuros más jóvenes y más pequeños sobreviven fuera del útero. Sin embargo, algunos hospitales aún no pueden dar tratamiento a los bebés que nacen antes de las 23 semanas de embarazo.
La madre Kim Cogburn dijo a TwentyTwo Matters que su hija nació a las 22 semanas de embarazo, pero el hospital se negó a intentar salvarle la vida.
Kim Cogburn wrote:
— TwentyTwoMatters (@22Matters) July 24, 2021
“I lost my baby girl at 22 +6 weeks in 2018 as I went into preterm labor. I was in a level 4 nicu hospital that refused to help my baby. We held her for 2 hours until her heart stopped 😪.”#TwentyTwoMatters pic.twitter.com/S768nZXCm6
En español la traducción sería:
«Perdí a mi bebé a las 22 semanas en 2018 cuando entré en trabajo de parto prematuro», dijo Cogburn. «Estaba en un hospital de Nicu de nivel 4 que se negó a ayudar a mi bebé. La abrazamos durante 2 horas hasta que su corazón se detuvo».
En la cuenta de Twitter del grupo, la desgarradora historia de Cogburn se yuxtapone con muchas otras historias de bebés prematuros que sobrevivieron y ahora están prosperando a pesar de haber nacido en la misma etapa del embarazo.
Fayth, por ejemplo, nació con solo 21 semanas y cinco días de embarazo, pero ahora es una próspera niña de 8 años.
Twenty Two Matters también mantiene una lista actualizada de hospitales que se ha confirmado que han salvado a los bebés nacidos a las 21 y 22 semanas de embarazo.
La viabilidad es una línea en movimiento. En la década de 1970, se consideraba que los bebés eran viables aproximadamente a las 28 semanas de embarazo, pero a medida que avanzaba la medicina, la línea retrocedió a las 24 semanas y ahora está aproximadamente 22 semanas.
Un estudio reciente publicado en el New England Journal of Medicine muestra que un número creciente de bebés prematuros sobreviven a las 22 semanas de embarazo. Sin embargo, el estudio también encontró que muchos hospitales no intentan salvar a los bebés que nacen en una etapa tan temprana.
Afortunadamente, esta investigación y la promoción de grupos como TwentyTwo Matters están impulsando cambios. En 2019, la Asociación Británica de Medicina emitió nuevas pautas que fomentan el tratamiento médico para los bebés nacidos a las 22 semanas de embarazo. Anteriormente, las pautas no recomendaban el tratamiento hasta las 24 semanas.
En junio, el Libro Guinness de los récords mundiales declaró a Richard Scott William Hutchinson, de Wisconsin, el bebé más prematuro que jamás haya sobrevivido, informa CNN. En 2020, nació a las 21 semanas de gestación, 131 días antes de su fecha de parto, con un peso de 11.9 onzas, informa WCCO Minneapolis.
En 2017, la revista Pediatrics destacó la historia de otra niña que sobrevivió después de nacer a las 21 semanas y cuatro días de embarazo.
