(UCV/InfoCatólica) El Patronato de la UCV concederá la máxima distinción de la Universidad al cardenal Sarah el próximo 1 de julio «por su extraordinario servicio a la Iglesia a lo largo de su extensa trayectoria en las sucesivas responsabilidades que le fueron confiadas por los últimos tres últimos Pontífices: san Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco».
El máximo órgano de la UCV reconoce al purpurado «su dedicación y compromiso a la promoción humana desde la caridad, la evangelización de los pueblos, la pastoral y la formación sacerdotal. Asimismo, el cardenal Robert Sarah destaca por su entrega y acompañamiento en causas humanitarias, especialmente en sus viajes a zonas devastadas por conflictos bélicos y catástrofes naturales, y encomiable su esfuerzo por denunciar las consecuencias de estos conflictos, alzando su voz en defensa de los derechos de los refugiados, en todas partes portador del mensaje de esperanza de la Iglesia».
San Juan Pablo II: «el niño obispo»
Su ordenación como presbítero fue en julio de 1969 en Conakry. En Roma obtuvo la licenciatura en Teología de la Pontificia Universidad Gregoriana y enriqueció su formación en el Pontificio Instituto Biblicum, tanto en Roma como en Jerusalén. De regreso a su tierra natal, por sus dotes sobresalientes como párroco de Boké, fue nombrado rector del seminario menor en Kindia, cargo desde el que fue promovido por san Juan Pablo II como arzobispo de Conakry, quien lo apodó «el niño obispo», ya que cuando recibió la ordenación episcopal en 1979, era el obispo más joven del mundo, con tan sólo 34 años.
Como señala su biografía «maduró en una tierra difícil, marcada por el sufrimiento y el martirio de tantos sacerdotes que plantaron el árbol de la fe», por ello a pesar de su juventud no le faltó el empuje como acérrimo defensor de los derechos del pueblo africano y tuvo como objetivo la formación de sacerdotes, «guía para el pueblo de Dios entre desiertos materiales y espirituales». El 1 de octubre de 2001, el papa Juan Pablo II lo nombró secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, cargo que ocupó durante nueve años.
Bendecito XVI: misión en la promoción humana de los necesitados
El 7 de octubre de 2010 el papa Benedicto XVI lo nombró presidente del Pontificio Consejo Cor Unum, donde se entregó a la misión marcada por la encíclica Deus caritas est. En esta misión de la caridad y la promoción humana, defendió que «las organizaciones que realizan actividades caritativas en nombre de la Iglesia nunca deben inspirarse en ideologías sino guiarse por la fe que también se manifiesta a través de la caridad, que nos impulsa y conduce hacia los pueblos que sufren».
En un sólo un mes su labor fue tan destacada que en el consistorio el 20 de noviembre de 2010 fue creado cardenal por Benedicto XVI, otorgándole el título diaconal de San Juan Bosco en la Via Tuscolana
Papa Francisco: promoción pastoral litúrgica
Como cardenal electo participó, al igual que el cardenal Antonio Cañizares, en el cónclave de marzo de 2013 al papa Francisco. El 23 de noviembre de 2014, el nuevo pontífice lo nombró prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, que promueve la acción pastoral litúrgica, así como de la disciplina canónica de los sacramentos, sucediendo como prefecto al cardenal valenciano.
El cardenal Robert Sarah dejó su cargo en el dicasterio vaticano el 20 de febrero de 2021, ocho meses después de haber cumplido 75 años, tras ser aceptada su renuncia. El 3 de mayo el papa Francisco, manteniendo el título de san Juan Bosco en la Vía Tuscolana, lo promovió al orden de los presbíteros, al llevar más de una década como cardenal diácono.
Autor desde la fe
En su dimensión intelectual desde la antropología cristiana, el cardenal Robert Sarah ha publicado varios libros muy apreciados, traducidos a varios idiomas: Dios o nada, La fuerza del silencio, Desde lo más hondo de nuestros corazones y Se hace tarde y anochece, sobre la crisis cultural e identitaria de Occidente.
Sarah ha realizado varias visitas a España, entre otros lugares, a Ávila, Sevilla, Toledo o Valencia, donde en el año 2012 impartió formación dirigida a sacerdotes.
El próximo 1 de julio recibirá el máximo reconocimiento de la Universidad Católica de Valencia como doctor honoris causa por su vasta dedicación y compromiso a la promoción humana desde la caridad, la evangelización de los pueblos, la pastoral litúrgica y la formación sacerdotal. La entrega se celebrará a las 20:00 horas en la Facultad de Teología de Valencia.