(Agencias/InfoCatólica) Los datos sobre defunciones en España durante 2020 recabados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan que en el primer año de la pandemia las defunciones se dispararon un 17,7%, con 75.305 fallecimientos más que el año anterior. En total 492.930 personas perdieron la vida.
Crecimiento vegetativo muy negativo
Este aumento de la mortalidad en España ha hecho también que la esperanza de vida disminuya en 1,24 años, al situarse en los 82,34 años, y que el crecimiento vegetativo, esto es, la diferencia entre nacimientos y defunciones, sea negativo en 153.167 personas, frente a las 57.146 de 2019.
Con la pandemia también se produjo un importante descenso en la natalidad española. Durante 2020 se registraron 339.206 nacimientos, un 5,9% menos respecto al año anterior, es decir, 21.411 nacimientos menos. Esta tendencia a la baja continúa así desde la última década, donde, desde 2010, la cifra ha descendido un 30,3% y solo creció en el año 2014.
El mes de noviembre fue el peor para los nacimientos, aunque la mayor caída se produjo en el mes de diciembre, con una reducción del 21,5% respecto al año anterior. Este dato se ajusta al inicio de la pandemia, pues en diciembre estaba esperado que nacieran los niños concebidos en marzo de 2020, coincidiendo con el primer confinamiento domiciliario –decretado el 15 de marzo de 2020–.