(Ane/InfoCatólica) La retirada de estos aportes económicos, que incluye también las ayudas para los desayunos escolares gratuitos, fue denunciada por la Conferencia Episcopal Ecuatoriana en un comunicado público en el que rechaza esta acción del presidente Lenin Moreno y en particular del Ministerio de Educación que durante estos 4 años ha transitado en medio del caos y de falta de una política pública en este campo.
«Al final de su mandato nos hubiera gustado agradecerle por los servicios prestados en favor de la educación católica y concretamente por la educación fiscomisional del país, algo que usted conoce bien ya que su padre trabajó en ella mucho tiempo. Lamentablemente no podemos sino dejar manifestada nuestra inconformidad respecto a los últimos acontecimientos que perjudican a los niños y a las familias que acceden a la educación gracias a la acción de los planteles fiscomisionales», señala parte de la carta enviada por el clero al gobernante que termina su mandato en las próximas horas.
Según la Iglesia Católica «el decreto 1278 de 22 de marzo del 2021 que contempla el pago del $ 200.oo, entre otros, para los docentes del ministerio de educación terminó siendo un engaño y hasta la fecha los profesores fiscomisionales, a los que también les paga el Estado, no han sido tomados en cuenta, consumándose un terrible acto de exclusión, respecto a los docentes que trabajan en los establecimientos públicos».
«No es posible que los maestros que trabajan con tanto entusiasmo en esta época de pandemia y a los que se les descontó el mismo valor que a los docentes fiscales terminen siendo excluidos. Todo tipo de exclusión es despreciable y nosotros dejamos constancia de nuestro rechazo a que no se haya considerado a los docentes fiscomisionales el pago de los $200.oo,» subraya el comunicado.
También anota que « no es posible que salgan disposiciones de Planta Central, donde se excluya los planteles fiscomisionales de la reposición de las partidas para atender a los estudiantes. Aquí cabe hacer una aclaración que parecería innecesaria pero que termina siendo absolutamente ineludible. Los estudiantes que asisten a los planteles fiscomisionales son ecuatorianos hijos de ecuatorianos y que pagan los impuestos igual que todos los ecuatorianos incluyendo los que asisten a la educación pública. No es posible que a esta altura de la historia se realice una exclusión de los planteles fiscomisionales afectados gravemente».
De otro lado denuncia el Clero que «a inicios del año escolar se ha solicitado la lista de los estudiantes que recibirán el refrigerio o desayuno escolar y nuevamente se excluye a los planteles fiscomisionales por lo que los niños y niñas no recibirán el desayuno escolar. Qué terrible infamia se comete con los más pobres y desvalidos. Rechazamos enérgicamente que a niños y jóvenes de los lugares más recónditos del país ubicados en zona de frontera.