(ACIPrensa/InfoCatólica) Este año, como era de esperarse debido a la pandemia, la Marcha por la Vida se realizó de manera virtual. A pesar de ello tuvo una excelente acogida.
Tuvo lugar el 29 de enero, con la animación del cantante cristiano Matthew West.
Participó presencialmente una pequeña delegación de líderes provida que se dirigieron hacia el edificio de la Corte Suprema.
Algunos de los carteles decían: «Soy la generación provida», «los derechos humanos empiezan en el vientre materno», «yo me arrepentí de abortar», «reza por el fin del aborto».
Cuando llegaron a los exteriores del Capitolio, los asistentes procedieron de forma organizada a dejar rosas en el suelo.
El tema de este año fue «Together Strong: Life Unites» (Unidos somos fuertes: La vida nos une).
La directora de Desarrollo de la Marcha por la Vida, Katrina Gallic, dijo que «si bien la Marcha de este año luce diferente, sigue siendo un momento de unidad para el movimiento [provida] y un tiempo para recordar, el aborto divide a la madre de su hijo. La industria del aborto busca que la mujer crea que el embarazo es una enfermedad, que la maternidad significa renunciar a sus sueños, y que solo el aborto va a poder resolver sus problemas. Nada puede estar más lejos que la verdad.
El aborto también divide al hombre de su paternidad. La industria promueve un movimiento que tiene la narrativa mi cuerpo es mi elección, y al hacer eso, el aborto realmente permite al hombre alejarse de su responsabilidad, en lugar de establecer un sentido de deber para proteger y cuidar a su hijo y su madre.
Demandamos al presidente Biden considerar unificar decisiones políticas provida, que son respaldadas por la clara mayoría de los estadounidenses que creen que el aborto debe limitarse al menos a los primeros tres meses de embarazo, no en cualquier etapa del embarazo, incluyendo hasta el momento del nacimiento.
No queremos que los impuestos se usen para financiar el aborto que realizan instituciones abortistas como Planned Parenthood en el país, y además un 77% tampoco queremos que se financie en otros países como México, sino que el presidente Biden proteja a los más vulnerables de América».
Antes de la marcha varios oradores invitados dieron su mensaje para promover el cuidado y la protección de la dignidad humana de los no nacidos. Entre ellos el Arzobispo de Kansas City, Mons. Joseph F. Naumann, presidente del Comité de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB); Tim Tebow, deportista calificado y orador; J. D Greear, presidente de Southern Baptist Convention; Lila Rose, fundadora y presidenta de Live Action; Jim Daly, presidente de Focus on the Family; Benjamin and Kristen Watson de The One More Foundation.
Chris Smith, co-presidente de la Cámara Pro-Vida de Caucus (republicano de Nueva Jersey) dijo: «Señor presidente, el sueño de ‘justicia para todos’ no se puede lograr si todo un segmento de la sociedad es legalmente ignorado y discriminado por el lugar donde viven, en el útero de sus madres, y lo pequeñas e indefensas que son. Sabemos que entiendes esto. Lo entiendes, o al menos una vez lo hiciste».
También se pronunciaron otros representantes políticos y Tim Tebow dio su testimonio de vida. «Debido a su historia provida, ahora puedo compartir mi historia, pero es sólo porque mi mamá me dio una oportunidad. Hoy en día necesitamos estar en una misión de rescate por ellos [los bebés en el vientre materno]».
Monseñor Newmann explicó: «En estos tiempos difíciles de pandemia, disturbios, y nuevas amenazas contra la vida humana, pon soluciones pacíficas que siempre respeten las vidas de todas las personas nacidas y no nacidas. De manera especial, te pedimos por todas las madres en necesidades, aquellas que fueron heridas por el aborto. En unidad y en solidaridad, que podamos caminar con ellas en su tiempo de necesidad».