(ACN) En una entrevista con la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), el obispo de Maiduguri, Mons. Oliver Dashe Doeme, ha asegurado que no se iba a dejar intimidar por el ataque perpetrado en Pemi, cerca de Chibok, lugar donde en 2014 fueron secuestradas más de 270 alumnas, en su mayoría cristianas.
Tras el ataque de Nochebuena, en el que un sacerdote fue secuestrado, Mons. Doeme ha dicho: «Lo que Boko Haram nunca nos quitará es la fe. Nunca permitiremos que nuestra fe nos sea arrebatada por el mal. Nuestra fe es cada vez más fuerte. Cien personas fueron bautizadas en una parroquia en Nochebuena. La gente está muy comprometida».
Más bautizados, a pesar de la violencia yihadista
A pesar del período de violento conflicto que, según la organización nigeriana de derechos humanos Intersociety ha matado por lo menos a 12.000 cristianos desde junio de 2015, Mons. Doeme asegura que las acciones de Boko Haram, de hecho, están fortaleciendo la fe cristiana: «El año pasado, en mi diócesis había más católicos que cuando la crisis con Boko Haram no había comenzado. Mientras exista el Reino de Dios, ninguna malvada fuerza humana lo derrotará. Más de doscientas iglesias han sido quemadas, así como escuelas, pero no seremos derrotados», el obispo ha añadido: «Somos un pueblo de fe y, como Iglesia, Boko Haram no es el único mal que hemos afrontado. Somos profundamente devotos de la Virgen. Dios aplastará a Boko Haram a su tiempo».
Otros ataques en Navidad
En Nigeria no es la primera vez que grupos islamistas perpetran un ataque en Navidad: en 2019, la Provincia del Estado Islámico de África Occidental (ISWAP, por sus siglas en inglés) decapitó a diez cristianos el día de Navidad, mientras que Boko Haram mató a siete en una incursión en la Nochebuena de 2019.
Mons. Doeme ha dicho a ACN: «Boko Haram está en contra de los cristianos. Con estos ataques quieren asustar a las comunidades y arruinar las fiestas navideñas. No quieren que los cristianos disfruten de la Navidad». Y ha añadido: «El Gobierno está luchando por contener a Boko Haram, pero hay saboteadores que filtran información a Boko Haram incluso cuando están en el monte». El obispo ha concluido la entrevista con palabras de gratitud hacia ACN y sus benefactores por su apoyo: «Nuestro mayor apoyo viene de ACN, sin ACN la diócesis se colapsaría. Seguiremos rezando por ustedes, tengan por seguro nuestro profundo aprecio».