(Aica) Después de la Guerra de los Seis Días, el área fue ocupada por Israel y se convirtió en una zona de minas. Después de la remoción de minas, lo que alguna vez fue un campo de batalla se ha convertido en un lugar de paz.
«Del campo de batalla al lugar de paz y oración», con estas palabras el custodio de Tierra Santa, el padre Francesco Patton OFM, anunció la devolución oficial a la Custodia de Tierra Santa de la pequeña iglesia de San Juan Bautista en Qasr Al-Yahud , ubicada en el río Jordán que conmemora el bautismo recibido por Cristo de manos de Juan el Bautista.
Iglesia de San Juan Bautista en Qasr Al-Yahud
En 1932 la Custodia de Tierra Santa compró el terreno «Qasr al-Yahud», que era un lugar visitado por peregrinos desde 1641. Años después, los franciscanos construyeron un convento con una pequeña iglesia llamada San Juan Bautista que fue confiada a los frailes de Jericó.
Sin embargo, en 1967 durante la guerra de los seis días, los franciscanos tuvieron que escapar y perdieron ese lugar de oración. Poco después, todo el terreno se convirtió en un campo minado por lo que se prohibió la entrada a peregrinos y turistas al tratarse de zona militar.
En el 2000 se abrió un pequeño acceso con ocasión del viaje apostólico de San Juan Pablo II a Tierra Santa durante el Jubileo, pero después de la segunda intifada se volvió a cerrar.
Desde 2011 se realizó una larga operación de desminado en toda la zona y se eliminaron al menos cuatro mil minas.
Finalmente, hace tres meses los franciscanos recibieron nuevamente el convento.
Según explicó el padre Patton, el haber «dejado los agujeros de bala visibles en las paredes y columnas de la iglesia para conmemorar las heridas y cicatrices de la guerra, debe ser una advertencia para los peregrinos y sobre todo para las generaciones futuras: no se olviden para no caer en los mismos errores. Lo que ayer era un campo de batalla, ahora se convirtió en un campo de paz y oración«.
Fiesta del Bautismo del Señor
En esta línea, después de más de 50 años, el domingo 10 de enero de 2021 una pequeña delegación celebraó allí la fiesta del Bautismo del Señor. Fueron alrededor de 50 personas debido a las disposiciones de las autoridades por la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus.
La misa fue presidida por el Custodio de Tierra Santa, padre Francesco Patton OFM, quien fueacompañado, entre otros, por el nuncio apostólico en Jerusalén, monseñor Leopoldo Girelli.
Junto a los frailes, participaron también en la celebración algunos miembros del cuerpo diplomático presentes en la región.