(Fides/InfoCatólica) El jueves 26 de noviembre, en el pequeño pueblo de Barsha, en la gobernación egipcia de Minya, se han presentado nuevamente ataques contra la comunidad cristiana.
Varios grupos de atacantes islamistas, asaltaron la iglesia, algunas casas y comercios de cristianos coptos con piedras y cócteles molotov. Hubo saqueos y varias personas heridas.
Fue necesaria la intervención policial para calmar los enfrentamientos. La policía detuvo a 100 personas.
Todo comenzó después de una publicación hecha en la cuenta de Facebook de un joven copto que resultó ofensiva contra el islam y el profeta Mahoma.
El general Osama Al Qadi, gobernador de la provincia de Minya, convocó inmediatamente una reunión con una representación de notables del pueblo y de la región para encontrar una solución oportuna a la crisis y poner fin a estos ataques.
La reunión se llevó a cabo y asistieron representantes del Comité de Reconciliación y Dotaciones Religiosas, la Universidad de al-Azhar, la Iglesia Copta y la Casa de la Familia Egipcia, organismo interreligioso creado para prevenir los conflictos sectarios.
El Gobernador dijo que se tomarán medidas oportunas contra aquella persona que ofenda a otra y que no se permitirá sembrar la discordia entre personas de la misma nación.
Esto no ha podido evitar la divulgación en las redes sociales de propaganda sectaria.
En Barsha no es la primera vez que sucede algo similar, en el pasado ya se han superado problemas como estos a través de los llamados «encuentros de reconciliación», reuniones públicas organizados por las autoridades locales en los que miembros de diferentes comunidades religiosas llevan a cabo actos públicos de reconciliación. Aunque sigue siendo cuestionada su eficacia.