(InfoCatólica) El párroco de Virgen del Mar, D. Enrique Abánades García, ha confirmado a InfoCatólica el robo de uno de los sagrarios, el de más valor. El delito ha sido ya denunciado a las autoridades.
El P. Enrique ha indicado que lo sucedido debe llevar a los fieles de la comunidad parroquial a volcarse aún más en el amor por Cristo sacramentado. Es decir, pretende que de este mal se obtenga por la gracia de Dios un gran bien. En medio del dolor por lo ocurrido, buscarán la ayuda del Señor para ser instrumento de evangelización en uno de los barrios más humildes de la capital de España. El sacerdote recuerda que Cristo también está presente entre los necesitados y los que más sufren, que a veces también son violentados de las más diversas maneras.
Se espera que el cardenal arzobispo de Madrid determine cuándo se produce un acto de reparación por la profanación.
Comunicado en el muro de Facebook de la Parroquia Virgen del Mar
¡Buenos días! Hoy el beso de Jesús viene con la foto de uno de los Sagrarios de mi parroquia, Virgen del Mar, que ayer sufrió la *profanación de la Eucaristía*. Se llevaron el Sagrario de la capilla y, este de la foto, lo destrozaron para llevarse al Señor.
Un hecho así, nos llena de *dolor y de tristeza*, sentimos que nos «han violentado» entrando así en nuestra casa común. Pero Jesús nos muestra con todo esto tres cosas que podemos sentir: *miedo, tristeza, rabia*. *Miedo* a que pueda sucedernos algo más o que vuelva a pasar. *Tristeza* porque se han llevado al Señor y no sabemos qué harán con él. Y *rabia*, porque nos han dado un fuerte golpe como Comunidad y como Iglesia.
Pero dejemos que la luz de Jesús nos ilumine y nos muestre que *todos los días hay profanaciones*: en cada persona que es violentada, que sufre la violencia de cualquier tipo, que es explotada... no escondamos lo que sentimos, evangelicémoslo para que podamos crecer en el amor a Jesús, a la Iglesia y a los demás.
Solo asi podremos *crecer como familia de Hijos de Dios*, que solo saben *perdonar, amar y entregar la vida*. Esta es la mejor y única forma de llevar el Evangelio a los que nos rodean. Quedémonos con los *sentimientos de amor a Jesús y a la Iglesia y a toda persona que ponga en nuestras vidas* que también surgieron en nuestros corazones: vivir en el amor es lo que hace que se difunda el buen olor de Jesús que nos habita.
Pidamos hoy a Jesús que *evangelice nuestro corazón*. Orad por la Comunidad de Virgen del Mar y por aquellos que nos han herido de esta manera, para que se encuentren con el abrazo misericordioso de Dios y se conviertan al bien.
¡Feliz día! Rezad por nosotros