(CNA/InfoCatólica) Según el P. Lasarte, «es más peligroso cuando el cristianismo muere no por un ataque exterior sino por una enfermedad dentro de su propia sociedad, de la propia Iglesia».
También señaló los peligros para la Iglesia de la «autorreferencialidad», que el papa Francisco ha destacado con frecuencia como un peligro para los católicos.
«Es un grave peligro cuando esta mentalidad de secularización entra en nuestro interior», dijo Lasarte. «Creo que esta es la pregunta más profunda y más preocupante para la Iglesia hoy en día.»
Lasarte ha sido misionero salesiano en África durante más de 25 años. Está a punto de regresar a Angola después de cinco años como parte del equipo de formación misionera de la congregación salesiana. Habló con un grupo de periodistas durante un encuentro online el 7 de septiembre sobre la actividad misionera de la Iglesia, organizada por la Asociación Iscom.
Hoy en día, la «misión» no tiene fronteras ni límites geográficos, dijo Lasarte, señalando la interculturalidad de la Iglesia.
Cada Iglesia necesita dar y a la vez recibir misioneros, dijo. «Porque incluso las Iglesias que tienen muchas vocaciones necesitan gente de otras culturas, de otras Iglesias»
El peligro, sugirió, es no poder separar a la Iglesia de la cultura en la que se encuentra. «Una de las bellezas de la Iglesia es que es la misma dondequiera que se encuentre», enfatizó.
Lasarte argumentó que había una tendencia de la Iglesia en Europa a querer parecer «normal», a mezclarse, a no entrar en «conflicto con la sociedad global».
Señaló que los cristianos del siglo primero tenían claro lo que significaba vivir en una cultura, pero vivir la identidad distintiva de un cristiano. Fueron perseguidos precisamente por vivir de forma diferente a la cultura pagana en la que vivían, dijo.
«Esa es una dinámica que la Iglesia vivirá hasta el final de los tiempos. Es decir, ser una luz, integrada en la sociedad, pero, por otro lado, ser ella misma, asumiendo a veces esos conflictos [necesarios] para ser cristiano», afirmó Lasarte.
Necesita ser más madre y maestra
Dijo que la Iglesia hoy en día es una buena gestora, pero «demasiado poco madre» y «demasiado poco maestra», instando a un fortalecimiento de ambos roles.
Alguien puede saber cómo dialogar, cómo escuchar bien, cómo enfrentarse a la cultura, pero también debe «tener una libertad del Espíritu, de la alegría de comunicar la vivencia más profunda de Jesucristo resucitado», dijo.
Esto, explicó Lasarte, es «la misión permanente de Jesucristo, que dio a la Iglesia para anunciar el kerigma, para anunciar su persona, y su Evangelio». Añadió que esto era lo que daría fruto a la misión de la Iglesia hoy en día.
Según el misionero, hay tres elementos importantes para la reevangelización de la Iglesia en Occidente: La renovación del «primer anuncio» del Evangelio, la comunidad cristiana y la conversión personal.
La fe necesita ser mucho más interiorizada y personal, dijo. Señaló que muchos jóvenes en Europa saben mucho sobre películas en Netflix, pero nada sobre la Iglesia o Jesucristo, lo que requiere el primer anuncio del Evangelio.
Y la comunidad no es sólo una cosa importante o «bonita», dijo. «La vida eclesial comunitaria» es «un tema fundamental de la fe cristiana».
El misionero también habló del aumento de la persecución de los cristianos y el crecimiento de la Iglesia en África y Asia.
«Según las estadísticas, [África] es el futuro de la Iglesia», dijo. «Esto es algo que nos llena de alegría, de esperanza.»