(InfoCatólica) El portavoz de la CEE expone cómo entiende él que debería ser, obviamente no lo es, un régimen democrático:
La democracia presupone el cultivo de lo que no se pone a votación: la vida, la dignidad de la persona, la libertad de conciencia, la honda aspiración a la verdad, el bien y la belleza, la igualdad de derechos, la historia compartida como nación… Votamos porque no todo se vota.
— Mons. Luis Argüello (@MonsArguello) August 9, 2020
Días atrás el prelado ofreció su reflexión sobre la situación actual, en la que la verdad ha dejado de ser una referencia a tener en cuenta:
No importan los hechos, solo la interpretación, dice el axioma fundante de la postverdad. El primado de la interpretación ofrece como premio la más atractiva de las ilusiones: tener siempre razón, a pasar de ser desmentido por la realidad o por la hemeroteca.
— Mons. Luis Argüello (@MonsArguello) July 26, 2020
Y advierte del peligro de acercarnos a lo que se indica en la Granja de Orwell:
Qué importante es en esta hora una propuesta que no nos trate como animales al servicio de las necesidades de la granja, ni quiera seducirnos como la antigua serpiente, sino que favorezca la humilde conciencia de ser hombres y la virtud de ensanchar nuestra humanidad.
— Mons. Luis Argüello (@MonsArguello) July 19, 2020