(CNA/InfoCatólica) La orden del gobernador, emitida ayer lunes, vino después de que el condado de Montgomery, el más poblado del estado, emitiera otra orden el 31 de julio que prohibía a todas las escuelas no públicas abrir con clases presenciales antes del 1 de octubre.
El Director de Salud del Condado de Montgomery, Dr. Travis Gayles, dijo el viernes por la tarde que «en este momento los datos no sugieren que la instrucción en persona sea segura para los estudiantes o los maestros», y aseguró que el cierre forzoso de las escuelas no públicas era «necesario para proteger la salud y la seguridad de los residentes del Condado de Montgomery» durante la pandemia.
Durante el fin de semana, Hogan emitió una respuesta inicial a la orden del Condado de Montgomery, diciendo que «estaba muy en desacuerdo» con el cierre forzoso de todas las escuelas no públicas. «Siempre y cuando estas escuelas desarrollen planes seguros que sigan las pautas de los CDC y del estado, deberían estar facultadas para hacer lo mejor para su comunidad», dijo Hogan el 1 de agosto. Y añadió:
«Esta es una decisión que corresponde a las escuelas y a los padres, no a los políticos».
El lunes, el gobernador dijo que «las escuelas privadas y parroquiales merecen la misma oportunidad y flexibilidad para tomar decisiones de reapertura basadas en las directrices de salud pública».
«El mandato de cierre general impuesto por el condado de Montgomery era demasiado amplio y no era coherente con las facultades delegadas al director de salud del condado», dijo Hogan.
La Archidiócesis de Washington, de la cual forma parte del condado mencionado, se había comprometido durante el fin de semana a «analizar» la orden.
El arzobispo de Washington, Wilton Gregory, dijo en una declaración el domingo que la archidiócesis «sigue teniendo la salud y el bienestar de nuestros estudiantes, profesores y padres en primer lugar en la mente y el corazón al tomar nuestras decisiones sobre la reapertura de nuestras escuelas católicas».
«Seguiremos esforzándonos por ser buenos ciudadanos y ser fieles a nuestros principios religiosos, a nuestra misión pastoral y a nuestras obligaciones con nuestras familias», dijo Gregory.
El anuncio del viernes del condado tomó a muchas escuelas privadas por sorpresa, ya que no se había mencionado ningún tipo de cierre forzoso durante las reuniones con los funcionarios de salud a principios de la semana.