(CH/InfoCatólica) En una carta pastoral enviada el domingo, la Conferencia Episcopal Filipina (CBCP) arremetió enérgicamente contra la aprobación de la Ley Antiterrorista. Los obispos mostraron su «incredulidad sobre la manera en que el polémico proyecto de ley antiterrorista fue acelerado y aprobado en ambas Cámaras del Congreso mientras la atención de todo el país se centraba en la pandemia de Covid-19».
La carta fue firmada por el vicepresidente de la CBCP, el obispo Pablo Virgilio David de Kalookan, que está al frente del organismo eclesial mietras que su presidente, el arzobispo Rómulo Valles de Davao se recupera de un reciente derrame cerebral.
Tras comparar la nueva ley filipina con la «amenaza a las libertades básicas y los derechos humanos» resultante de la reciente Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong, los obispos recordaron a los expertos jurídicos que han advertido que las nuevas leyes de seguridad de Filipinas son «incompatibles con nuestra Constitución» y suponen una «grave amenaza para las libertades fundamentales de todos los filipinos pacíficos».
En la carta de los obispos se comparaba el «regreso de las 'detenciones sin orden judicial' a través de esta nueva ley» con los «movimientos de 1972 que finalmente condujeron a la caída de la democracia y al surgimiento de un régimen dictatorial que aterrorizó al país», en referencia a la imposición de la ley marcial impuesta al país por el ex presidente Ferdinand Marcos.
Y añadieron:
«En medio de este sombrío panorama político, nos consuela el hecho de que grupos de abogados y ciudadanos comunes hayan presentado peticiones ante el Tribunal Supremo, cuestionando la constitucionalidad de la ley recién firmada. ¿Asegurará el más alto nivel de nuestro Poder Judicial su independencia, o también sucumbirán a la presión política?»
Réplica y contrarréplica
La respuesta del gobierno ha venido de parte de Salvador Panelo Jefe de la Asesoría Jurídica de Rodrigo Duterte, quien a su vez calificó de inconstitucional carta de la CBCP
Panelo dijo que el comentario político incluido en la propia carta de los obispos «parece haber» violado la Constitución, citando el mandato constitucional sobre la separación de la iglesia y el estado. Panelo rechazó los argumentos constitucionales de la carta, diciendo que «repite como un loro la falsa narrativa favorita de los detractores del proyecto de ley antiterrorista, que afirman que viola la Constitución».
En respuesta a Panelo, el portavoz de la CBCP, P. Jerome Secillano, dio una entrevista a ABS-CBN en la que explicaó que la conferencia episcopal «no puede quedarse callada sobre todas estas cosas», ya que si «la Iglesia ya no habla de todos estos asuntos. cuando de hecho se cometen errores a izquierda y derecha, entonces dejamos de existir como Iglesia».
Sobre la cuestión de la disposición constitucional para la separación de la Iglesia y el Estado, el P. Secillano dijo que sólo «significa que el Estado no va a establecer una religión oficial» y que «los fondos del Estado no deben utilizarse para financiar una religión en particular». Pero añadió que «en realidad no impide a los líderes de la Iglesia, sacerdotes, obispos o cualquier religioso expresar sus opiniones políticas».
El P. Secillano concedió su entrevista a ABS-CBN, después de que la cadena perdiera recientemente la renovación de su licencia y se le prohibiera emitir en televisión y radio. La carta de los obispos había denunciado anteriormente el «efecto escalofriante» de la decisión del gobierno de cerrar la mayor red de difusión del país y la describió como parte de un «patrón de intimidación» más amplio creado por el régimen de Duterte.