(Crux/InfoCatólica) Los atacantes violaron y golpearon a algunas de las 50 Hermanas Bannabikira, conocidas como las Hijas de María, en su convento de Bwanda el pasado 10 de julio.
Además de ordenar la investigación, el presidente ugandés ha ordenado que se establezca un puesto policial cerca del convento para evitar futuros ataques.
Las hermanas tienen escuelas, una granja lechera, una fábrica de velas, una panadería y estanques de peces. También fabrican vestimentas clericales.
La policía dijo que los ladrones desconectaron las cámaras de seguridad y se llevaron los discos duros en los que se almacenan las grabaciones de dichas cámaras.
La hermana Bernadette Namabalilwa, superiora en funciones de la congregación, describió cómo los asaltantes «golpeando conntinuamente a las monjas pidiendo dinero». Los atacantes huyeron con dinero, teléfonos y ordenadores portátiles, dijo.
La actitud del presidente Museveni puede dar como resultado la detención de los asaltantes, algo que no sería fácil si las víctimas del robo no hubieran sido religiosas tan queridas por la población.