(CNA/InfoCatólica) La oficina de estadísticas de Munich informó a CNA Deutsch, que 10.744 católicos se retiraron formalmente de la Iglesia en 2019. El año anterior, 2018, se habían dado de baja 8.995 personas.
Desde que se tienen regisros, es la primera vez que las bajas anuales superan la cifra de 10.000. Anteriormente, la cifra más alta era de 9.010, y tuvo lugar en 1992.
El cardenal Reinhard Marx, arzobispo de Munich y Freising, anunció en febrero que no se presentaría a la reelección como presidente de la conferencia episcopal alemana. Lo justificó por su edad (66 años) y su deseo de pasar más tiempo en su archidiócesis, en el corazón católico de Baviera, que pastorea desde 2008.
En marzo, la Bayerischer Rundfunk, la emisora de servicio público de Baviera, informó de que la gente dio como razones para abandonar la Iglesia el deseo de dejar de pagar el impuesto eclesiástico, el escándalo de los abusos sexuales por parte del clero y la posición de las mujeres dentro de la Iglesia.
La Iglesia en Alemania se financia en gran parte a través de un impuesto recaudado por el gobierno. Si un individuo está registrado como católico, entonces el 8-9% de su impuesto sobre la renta va a la Iglesia. Ocurre lo mismo con la comunión eclesial luterana oficial. La única manera para dejar de pagar el impuesto es hacer una declaración oficial renunciando a la pertenencia a la Iglesia.
Sin embargo, aunque el número de católicos que abandonan la fe ha aumentado constantemente desde los años 60, los ingresos de la Iglesia, debido a la prosperidad económica de la población alemana, también han aumentado. En 2018, los ingresos de la Iglesia ascendieron a 6.640 millones de euros, a pesar de que 216.078 personas abandonaron la Iglesia en todo el país, según un informe de la conferencia episcopal alemana.