(InfoCatólica) Tras la reunión, la CEA hizo público un comunicado en el que se informo de la posibilidad de mantener los templos abiertos pero sin celebración de Misas.
Texto del comunicado
Monseñor Oscar Ojea, obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina; el cardenal Mario Poli, primado de la Argentina, arzobispo de Buenos Aires y vicepresidente primero, y monseñor Carlos Malfa, obispo de Chascomús y secretario General del episcopado argentino, se reunieron con el jefe de Gabinete de Ministros, licenciado Santiago Cafiero, quien los recibió con el canciller ingeniero Felipe Solá y el secretario de Culto, doctor Guillermo Olivieri.
Se dialogó sobre esta nueva etapa del aislamiento social, preventivo y obligatorio y la diferente realidad que afecta a cada lugar del país. Se ratificó la posibilidad de que los templos estén abiertos para la oración individual, y los sacerdotes puedan recibir, de ser posible de manera previamente acordada, a los fieles que soliciten ayuda y orientación espiritual. Siempre teniendo en cuenta las disposiciones sanitarias.
“En cuanto a la celebración con participación de los fieles, cuando llegue el momento adecuado para las mismas, se acordó ir trabajando en la elaboración de los protocolos litúrgicos y sanitarios correspondientes”.
Se da la circunstancia de que Argentina es uno de los países menos afectados por la pandemia, con amplias zonas del país sin contagiados. A día de ayer, se han confirmado 6225 casos, de los cuales se han curado 1824. El número de muertos es de 314.
La nación se encuentra en un aislamiento social, preventivo y obligatorio desde el 20 de marzo y ante el aplacamiento de la curva de contagios, el Gobierno dispuso una reapertura progresiva de las actividades en todo el país, excepto Buenos Aires y su área metropolitana, donde está concentrado el 67 % de todos los casos a nivel nacional.