(Diario de Cádiz) La capilla, donde el Santísimo está expuesto durante las 24 horas del día desde hace algo más de tres años, ha permanecido abierta ininterrumpidamente también durante los diez días del estado de alarma, si bien entre los voluntarios que mantienen el culto de manera permanente durante todo el año -unas 500 personas, principalmente mayores- se registraron bajas al decretarse el confinamiento en casa.
Estas vacantes se han estado cubriendo con un grupo de voluntarios durante estos días. No obstante, finalmente se ha optado por cerrar provisionalmente la capilla dada la situación excepcional que se vive en estos momentos para proteger a los fieles de un posible contagio por Covid-19.
«Estoy seguro de que cuando volvamos a reabrir contaremos incluso con más adoradores», ha afirmado el coordinador de la Adoración Perpetua en San Fernando, Francisco Vázquez.