(CNA/InfoCatólica) Mons. Delmas formó parte de una delegación de 31 obispos franceses que se reunieron con el Papa Francisco durante su visita ad limina el pasado 9 de marzo. Los medios del Vaticano compartieron fotos de los obispos sentados a un metro de distancia entre sí y a una distancia significativa del Papa.
La audiencia del Pontífice con los obispos franceses duró dos horas y media, según un comunicado de la conferencia de los obispos franceses.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede no ha respondido a una consulta de CNA preguntando si los obispos franceses saludaron al Papa Francisco con un apretón de manos después de la reunión, como es habitual durante las visitas ad limina. La audiencia tuvo lugar un día después de que el Vaticano confirmó que había implementado medidas de precaución en coordinación con las autoridades italianas, y de que la Diócesis de Roma anunciara la suspensión de todas las misas públicas durante tres semanas.
Los síntomas que experimenta el obispo Delmas son leves, y «su condición no es motivo de preocupación», dijo la diócesis de Angers.
Después de enterarse de su diagnóstico, Mons, Delmas, de 65 años, pidió que «todos los fieles perseveren en la oración. Que este tiempo de juicio sea una oportunidad para rezar, especialmente por los enfermos, los débiles y el personal de salud».
Durante su estancia en Roma, los obispos franceses se reunieron con funcionarios curiales en los diferentes dicasterios del Vaticano antes de que su visita ad limina se viera interrumpida por el empeoramiento de la situación en Italia y Francia.