(InfoCatólica/Catholic News Agency) El Gobernador de Tennessee ha anunciado que firmará un proyecto de ley para proteger a las agencias de adopción que entregan a niños en adopción de conformidad con la creencia de que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer.
El Senado estatal aprobó el Proyecto de ley 836 el primer día del período de sesiones legislativo de 2020, después de que la cámara baja lo aprobara el pasado abril. En Tennessee hay varias organizaciones católicas sin ánimo de lucro que actúan como agencias de adopción. La ley, que inmediatamente ha sido calificada de homófoba por varios medios de comunicación, protegerá a las agencias de adopción que sigan sus creencias religiosas y rechacen entregar niños en adopción a parejas del mismo sexo. Los solicitantes rechazados no podrán denunciar a una agencia ni pedir daños y perjuicios en esas situaciones.
Aunque en el pasado las agencias de adopción de carácter religioso han podido funcionar según sus convicciones morales en Tennessee, en otros estados las agencias católicas han tenido que cerrar o han perdido su financiación pública por negarse a entregar niños en adopción a parejas del mismo sexo.
Hasta el momento, Kansas, Oklahoma, Texas, Alabama, Dakota del Sur, Dakota del Norte, Virginia, Mississippi y Michigan han aprobado protecciones similares para las agencias de adopción. Esas protecciones, sin embargo, no siempre han frenado los ataques contra las agencias religiosas de adopción. En marzo de 2019, la nueva fiscal general de Michigan, Dana Nessel, demócrata y activista homosexual, llegó a un acuerdo con la organización progresista Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) para obligar a todas las agencias de adopción de Michigan a entregar niños en adopción a las parejas del mismo sexo cualificadas, como condición para recibir financiación estatal.
El senador Paul Rose, patrocinador republicano del proyecto de ley en el Senado de Tennessee, señaló que el gobierno de Donald Trump propuso en 2019 cambiar las normas federales para proteger a las agencias de adopción de carácter religioso. El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) anunció en noviembre de 2019 que cambiaría su forma de aplicar la normativa anterior y propondría una nueva norma, que permitiría que las agencias de adopción de carácter religioso siguieran recibiendo financiación federal sin ser obligadas por ello a entregar niños en adopción a parejas del mismo sexo en contra de sus principios religiosos. La Conferencia Episcopal norteamericana elogió el cambio.