(CNA/InfoCatólica) El jueves 12 de diciembre, el Senado de los Estados Unidos aprobó por unanimidad una resolución que reconoce por fin el genocidio armenio, después de que varios intentos anteriores fueron bloqueados por orden de la Casa Blanca.
De 1915 a 1923, el Imperio Otomano mató a aproximadamente de manera sistemática millón y medio de armenios en el este de Anatolia, además de desplazamiento forzado, tortura, asesinatos en masa y fosas comunes en la región.
La Resolución 150 del Senado, presentada por los legisladores Bob Menéndez y Ted Cruz, expresa «el sentido del Senado de que es política de los Estados Unidos conmemorar el genocidio armenio a través del reconocimiento oficial y el recuerdo».
La resolución del Senado reconoce la «campaña de genocidio del imperio contra armenios, griegos, asirios, caldeos, sirios, arameos, maronitas y otros cristianos». Se produce después de que la Cámara de Representantes aprobó una resolución similar en octubre reconociendo el genocidio.
Negación de Turquía
Turquía ha negado durante mucho tiempo que el genocidio haya tenido lugar, alegando que el número de muertos fue mucho menor de lo que comúnmente se estima y que muchas muertes se debieron a la actual Primera Guerra Mundial.
En respuesta a las resoluciones de genocidio armenio aprobadas por la Cámara y luego consideradas por el Senado, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en una conferencia de prensa conjunta del 13 de noviembre con el presidente Donald Trump, en la Casa Blanca, condenó los esfuerzos del Congreso para reconocer el genocidio.
«Y algunos desarrollos históricos y acusaciones se están utilizando para dinamitar nuestras relaciones recíprocas y bilaterales. Especialmente en la Cámara de Representantes, algunas de las resoluciones que se aprobaron el 29 de octubre cumplieron este propósito y perjudicaron profundamente a la nación turca, y tienen el potencial de arrojar una profunda sombra sobre nuestras relaciones bilaterales», dijo,
«Turquía y Estados Unidos se mantienen unidos para erradicar completamente al ISIS (Estado Islámico) y para traer paz y estabilidad a Siria de una vez por todas», añadió.
Después de la visita de Erdogan, la resolución del genocidio fue bloqueada por el senador Lindsey Graham, supuestamente bajo la dirección de la Casa Blanca.
Los intentos posteriores de llevar la resolución a consideración fueron bloqueados por los senadores David Perdue y Kevin Cramer. Según los informes, la Casa Blanca no quería que se promulgara la resolución debido a las conversaciones en curso con Turquía sobre la compra de un sistema de misiles ruso S-400.
Cramer, en un comunicado proporcionado a CNA -agencia en inglés del Grupo ACI-, dijo que ofreció bloquear la resolución cuando se le informó de la desaprobación de la Casa Blanca. «Cuando me dijeron de su preocupación, dije que bloquearía el UC (consentimiento unánime) si quisieran», afirmó.
Muchos especialistas han reconocido la campaña de desplazamiento, violencia y asesinatos de armenios, en su mayoría cristianos, por parte del Imperio Otomano, como genocidio.
Archivos del Vaticano
El Papa Francisco reconoció el genocidio varias veces, incluso en una Misa en 2015, poco antes del centenario del genocidio.
En 2015, el Vaticano hizo públicos algunos materiales de sus archivos relacionados con el genocidio armenio, incluida la correspondencia entre la Santa Sede y los líderes políticos y religiosos regionales.
Los archivos abarcan décadas antes de 1915, cuando se estaba produciendo la violencia sancionada por el Estado contra los armenios hasta bien entrado el siglo XX; y mostró los esfuerzos del Vaticano para sofocar la violencia contra los armenios y para ayudar a las víctimas del genocidio.
En su visita de junio de 2016 a Armenia, el Papa Francisco reconoció el «gran mal» del «genocidio» de los armenios.