(InfoCatólica) Pedro Sánchez ha descrito el pacto con el partido de extrema izquierda liderado por Pablo Iglesias:
«Ustedes saben que el acuerdo que hoy presentamos no fue posible en las anteriores elecciones, aunque estuvimos cerca de lograrlo. Somos conscientes de la decepción que supuso entre los votantes progresistas y también entre los ciudadanos que querían un Gobierno y superar la situación de bloqueo. El proyecto político es tan ilusionante que supera cualquier tipo de desencuentro que hayamos podido tener en los últimos meses. El compromiso del PSOE es lograr un Gobierno progresista sí o sí. No habría justificación para que se persistiera en el bloqueo. El documento firmado recoge las líneas fundamentales de las políticas del futuro Gobierno y no me voy a extender en ello, porque tendrán el contenido. Este Gobierno va a ser uno rotundamente progresista, porque estará integrado por fuerzas progresistas y sobre todo porque va a trabajar por el progreso de España y de todos los españoles. Lo único que no cabrá en el espíritu del Gobierno será el odio y la confrontación entre los españoles».
Y ha añadido:
«Este acuerdo nace con el propósito de abrirse a otras fuerzas políticas para hacer viable una mayoría parlamentaria estable y sostenida. El PSOE abrirá una ronda de contactos para conseguirla. Los españoles han hablado y su voto marca el único camino que es el que estamos empezando a recorrer hoy el PSOE y Unidas Podemos. Quiero agradecerle a UP y a Pablo Iglesias su predisposición a poder llegar a un acuerdo de gobernabilidad. Es un proyecto ilusionante que va a trabajar por el progreso de España y de los que más lo necesitan. Gracias y enhorabuena».
Por su parte, Pablo Iglesias, probable vicepresidente de Gobierno, ha explicado el pacto de la siguiente manera: Pablo Iglesias, secretario general de Unidas Podemos:
«Como dije en la noche electoral tras conocerse los resultados de las elecciones, lo que en abril era una oportunidad histórica se había convertido en una necesidad histórica. Me complace anunciar hoy junto a Pedro Sánchez que hemos alcanzado un preacuerdo que ustedes ya conocen para conformar un Gobierno de coalición progresista en España que combine la experiencia del PSOE con la valentía de Unidas Podemos. Un Gobierno que trabaje por el diálogo para afrontar la crisis territorial y por la justicia social como la mejor vacuna frente a la extrema derecha».
Y:
«Quiero agradecerle a Pedro Sánchez su generosidad y su disposición para construir un Gobierno con nosotros. Es tiempo de dejar atrás cualquier reproche y trabajar codo con codo en la tarea histórica e ilusionante que tenemos por delante. Es un verdadero honor poder trabajar desde el Gobierno para mejorar la vida de nuestros compatriotas, pudiendo empezar así el objetivo con el que nacimos. Pedro Sánchez sabe que podrá contar con toda nuestra lealtad y que vamos a dejar lo mejor de nosotros mismos en este Gobierno. Vamos a buscar el apoyo de otros grupos a este acuerdo para asegurar la mayoría parlamentaria necesaria para afrontar la investidura y la legislatura. En las próximas semanas, trabajaremos todos los detalles sobre el programa y estructura de Gobierno, que se conocerá después de la investidura. Pedimos calma y les iremos informando de todas las novedades a su debido tiempo. Gracias a la sociedad civil y a los colectivos sociales por su trabajo. Para nosotros, son ejemplo».
Comunismo bolivariano
La primer reacción política al acuerdo ha venido de Santiago Abascal, líder de Vox:
«El PSOE se abraza al comunismo bolivariano, a los aliados de un golpe de Estado, en mitad de un golpe de Estado. Le haremos responsable de cada daño que produzcan a la convivencia y al orden constitucional».
Pablo Casado, presidente del Partido Popular y líder de la oposición, ha manifestado el parecer de su partido:
«Hemos conocido la noticia que muchos españoles temían. Pedro Sánchez anuncia un acuerdo y ha ofrecido la vicepresidencia a Iglesias para formar un Gobierno radical, que es lo contrario que necesita España. Para este viaje no hacían falta alforjas, no estar seis meses sometidos a una negociación surrealistas, con tensiones territoriales y problemas en el empleo».
Y:
«Creo que la propia naturaleza de Sánchez es esta, al final acabar pactando con quien basa toda su carrera política, con quienes intentó pactar en 2015 y 2016, con quien hizo la moción de censura para echar al Gobierno del PP, y con quien intentó tras el 28-A».
Casado pide que vuelva el PSOE histórico
El dirigente del PP querría que volviera un PSOE que ya no existe:
«Sánchez tenía que asumir responsabilidades. Es urgente que el PSOE histórico vuelva. Es importante que Sánchez se vaya porque es el tapón, pero también que el PSOE sensato vuelva. Es a él a quien debe exigirle la opinión pública que salga del laberinto en el que él mismo se ha metido. Nuestro proyecto es incompatible con el programa de Sánchez. No vamos a ser partícipes de una investidura ante su anunciada propuesta de lo que él llama un Gobierno progresista, es decir, de izquierda radical, y en connivencia con la Generalitat de Cataluña que está instalada en la ilegalidad. Nosotros estaremos a la altura de las circunstancias»
Y:
«Sánchez ha elegido. A nosotros ni nos ha llamado. Dice ahora que va a llamar. Es evidente que cierra la puerta con estruendo a cualquier colaboración con el PP. Nosotros tenemos que decir que esto es muy preocupante, Sánchez ha elegido y nosotros tenemos que enarbolar la oposición y decir que si este acuerdo no va bien, el PP está con los españoles para representar una alternativa de futuro alejado de los extremismos, los independentistas y los radicales de Podemos».
El PSOE y Podemos suman entre ambos 155 diputados, por lo cual le faltan 21 para lograr la investidura en una primera votación, en la que se necesita la mayoría absoluta (176). Para la segunda votación basta con la mayoría simple, consistente en tener más votos a favor que en contra. Eso implica que necesitan el apoyo o la abstención de otras fuerzas políticas, entre las que se encuentran partidos que abogan por la ruptura de España.